La intensificación de la operación israelí destinada a eliminar a un alto cargo de Hamás ha tenido este martes trágicas consecuencias en el densamente poblado campo de refugiados de Jabalya. El Ministerio de Sanidad de Gaza informó de cientos de víctimas, tanto mortales como heridos, tras la serie de ataques aéreos.
Las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) confirmaron la muerte de Ibrahim Biari, alto comandante de Hamás, durante estas operaciones. Sin embargo, la magnitud de los daños colaterales ha suscitado preocupación internacional.
En el campamento de Yabalya se vio a socorristas y civiles rescatando a heridos y fallecidos, utilizando mantas y colchones para transportarlos. Las secuelas de los ataques se manifestaron en estructuras derrumbadas y un inmenso cráter. Mahmoud Bassal, representante de los servicios de emergencia de la Defensa Civil Palestina, calculó la demolición de unos 20 edificios.
Crece el temor ante el posible aumento de víctimas civiles y el empeoramiento de la situación humanitaria en Gaza, dada la escalada de las operaciones aéreas y terrestres de Israel.
Aunque prosiguen las labores de socorro, aún no está claro el número real de víctimas. El transporte de ayuda a la zona tiene dificultades para satisfacer la creciente demanda. Sin embargo, parece inminente un posible respiro, ya que Hamás y Egipto anunciaron el miércoles un acuerdo que permite el traslado de 81 heridos de Gaza a través de la frontera de Rafah.
El secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, hizo hincapié en la necesidad de “pausas humanitarias” durante una comparecencia ante el Senado en Washington. Por su parte, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su profunda preocupación por la escalada del conflicto y afirmó que el derecho internacional humanitario debe respetarse universalmente.
Imágenes de Al Jazeera mostraron los esfuerzos de rescate en Jabalya, con los residentes rebuscando entre los escombros. Mahmoud Bassal predijo que los equipos de emergencia podrían necesitar varios días para rescatar a todas las víctimas.
El principal centro sanitario de Gaza, el hospital al-Shifa, dio la voz de alarma por la escasez de recursos. Anunciaron el riesgo potencial de cortes de electricidad por falta de combustible, haciendo hincapié en la grave situación a la que se enfrentan en el contexto de la intensificación de los conflictos. Según una reciente actualización del Ministerio de Sanidad de Gaza, el número de muertos en los últimos 25 días ha superado los 8500, de los cuales más de 3500 son niños.
El portavoz militar israelí, teniente coronel Jonathan Conricus, detalló en una sesión informativa los enfrentamientos en curso entre las fuerzas israelíes y Hamás en diversas partes de la Franja de Gaza. A pesar de la escalada de las operaciones militares, se multiplican las peticiones de intercambio de prisioneros, en relación con los más de 200 rehenes en poder de Hamás.
En medio de estos acontecimientos, los rebeldes Houthi de Yemen lanzaron al parecer ataques con misiles y aviones no tripulados contra territorio israelí. En respuesta, las FDI activaron el sistema de defensa antimisiles “Arrow” cerca del Mar Rojo, lo que supuso su uso inaugural desde el inicio del conflicto de Gaza.
Además, la aviación israelí atacó ciudades libanesas con el objetivo de desmantelar la infraestructura de Hezbolá, según informaron el ejército israelí y la agencia de noticias estatal libanesa.
El paso fronterizo de Rafah, punto neurálgico de las labores de socorro, recibió la visita del primer ministro egipcio, Mostafa Madbouly. Reiteró la firme postura de Egipto contra cualquier estrategia israelí que pretenda desalojar permanentemente a los palestinos de Gaza.
El conflicto regional tiene implicaciones múltiples, con naciones como Egipto participando activamente en los esfuerzos de ayuda y oponiéndose a cualquier estrategia que pueda afectarles.
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Un nuevo episodio, de este, tu podcast, La pastilla.
