Fidel Castro comprendió el poder de las representaciones. Su voluntad convertida en ley que regula el uso de su nombre y su figura después de muerto, es el mejor ejemplo de ello. Con sus libros de artista, Camila R. Lobón rompe temerariamente con este mito de lo irrepresentable.
La posibilidad infinita de la mojigatería intelectual
El lema de la pasaba Bienal de La Habana ha sido “La construcción de lo posible”. Pero, ¿cómo se entiende “lo posible” en el actual contexto cubano? Conveniente ambigüedad.