En enero de 2014, anuncié a mi familia que iba a intentar ir a Laponia haciendo ‘autostop’ sin un euro en el bolsillo, solo con una maleta como galería y los pequeños cuadros que iría garabateando por el camino.
En enero de 2014, anuncié a mi familia que iba a intentar ir a Laponia haciendo ‘autostop’ sin un euro en el bolsillo, solo con una maleta como galería y los pequeños cuadros que iría garabateando por el camino.