Calle Rimbaud

El exilio me ha vuelto a su manera mudo. O lo fui durante años, poco antes de salir de la Isla. Ahora soy un hombre libre, pero mudo. Un mudo acaso bilingüe.

La gran comensal

Crecí en un medio en el que existía un orden policial con un fuerte basamento en el lenguaje. Y claro, toda política es un asunto lingüístico. Hay un contrato no escrito en el que palabras como democracia y oposición —son solo un par de ejemplos— son denostadas, pertenecen a un afuera.