Lo único que me dio por coger fueron los discos de Silvio. No me podía alejar de ellos, no había forma humana de que los pudiera dejar abandonados allí.
Hombre negro, Cuba roja
Black Man in Red Cuba (1970), de John Clytus, son las memorias de un afronorteamericano sobre la Revolución Cubana, ese proceso social que, leído hoy a ras del año 2020, es como si nunca hubiera existido. Aunque todavía esté ahí, como un fósil patiseco, flotando en el ámbar amargo de la fidelidad fascista y la idiotez ideológica.
Uber Cuba 0097
Hay sólo una cosa que ya nunca hago. Y eso que nunca hago, eso que ya no podría hacer aunque quisiera, ni aunque me pagaran una millonada, es la cosa más natural en el mundo moderno: atravesar un túnel.
Uber Cuba 0096
Ese mismo miércoles, de madrugada, Santiaguito Feliú se acababa de morir de manera repentina en la Isla. A sus cincuentiuno o cincuentidos años.
Uber Cuba 0095
El exilio cubano es esta rabia retórica: un dolor sin salida, un resentimiento sin consuelo ni conmiseración.
Uber Cuba 0094
Imagino a la policía universitaria disparando al aire antes de ponerse a darme caza, como un animal salvaje. Como lo que soy.
La Cuba de Allen Ginsberg: Stupid & Full of Authoritative Bullshit
Adoro leer diarios. Mi tesis de doctorado involucra diarios de peregrinos a la Utopía Caribe. Turistas de la ideología: compañeros de ruta de la izquierda internacional que fueron cayendo de cabeza o de culo en la querida Cuba de Castro. Adoro, además, a Allen Ginsberg. Hasta su comemierdad comunista me resulta entrañable. Pobrecito buen hombre, como tantos norteamericanos.
Uber Cuba 0093
Para los cubanos en Cuba fue John Clytus. Allí dejó a su primera y única novia del corazón: “una mujer negra atrapada en una revolución de hombres blancos”.
Uber Cuba 0092
El gas contemporáneo se llama “ferias comunitarias”. No se escandalicen todavía. Permítanme al menos intentar explicarme.
Uber Cuba 0091
Conozco de sobra esa expresión facial. La vi muchas noches, con y sin luna en el cielo caribe, hecha mueca de muerte en los rostros de los agentes para nada secretos que me arrestaban a sueldo del Ministerio del Interior.