El enigma de cómo se sabotearon miles de localizadores en un ataque israelí contra Hezbolá la semana pasada ha desencadenado investigaciones sobre la cadena de suministro que había detrás de ellos, llevando a los investigadores a un laberinto de empresas e individuos en la sombra que abarcan Asia y Europa del Este.
La búsqueda de quién estaba detrás de la fabricación, venta y distribución de los localizadores ha apuntado a algunas empresas creadas en los últimos años, sin apenas rastro documental de sus actividades y dirigidas por misteriosos empresarios con una vaga huella en Internet y poca experiencia en el sector de las telecomunicaciones.
Durante décadas, Irán y los grupos militantes a los que apoya, como Hezbolá, han utilizado empresas fantasma en todo Oriente Próximo y el Mediterráneo para obtener fondos y equipos al tiempo que eludían las sanciones. A su vez, Israel ha creado sus propias redes oscuras para infiltrarse en las cadenas de suministro utilizadas por Irán y los grupos militantes a los que respalda.
El ataque del martes es uno de un puñado de ejemplos en los que Israel probablemente ha penetrado en la cadena de suministro de comunicaciones de Hezbolá, dijo una persona familiarizada con las operaciones israelíes en el extranjero. “Pero es la primera vez que termina con una explosión como ésta”, dijo.
Personas informadas de la operación dijeron que Israel penetró en la cadena de suministro de Hezbolá y colocó explosivos en las baterías de los dispositivos. A continuación, los artefactos fueron detonados a distancia.
Hezbolá ha iniciado una investigación sobre la violación de la cadena de suministro.
¿Quién fabricó los buscas?
El rastro de los buscas comenzó en Taiwán la semana pasada, después de que una etiqueta en uno de los dispositivos que explotaron en Líbano indicara que había sido fabricado por Gold Apollo, una empresa taiwanesa. Después de que los periodistas acudieran a las oficinas de la compañía en las horas posteriores al ataque, la empresa dijo que no había fabricado los localizadores. Dijo que la licencia para fabricarlos había sido comprada por una empresa húngara poco conocida llamada BAC Consulting.
Un walkie-talkie que explotó dentro de una casa en Líbano.
Los fiscales de Taiwán iniciaron el miércoles una investigación para determinar si existen vínculos entre Gold Apollo y el atentado. El jueves, los investigadores de seguridad nacional citaron a dos ejecutivos de Gold Apollo y BAC Consulting, que opera en Taiwán bajo el nombre de Apollo Systems. Las autoridades registraron el jueves las oficinas de ambas empresas en cuatro lugares de Taipei. Gold Apollo ha negado cualquier vinculación con el atentado.
“No se han encontrado pruebas concretas que sugieran que ningún taiwanés estuviera implicado en el atentado terrorista”, declaró el viernes la fiscalía.
Apollo Systems ha alquilado un espacio de co-working en la zona de Taipei desde abril por unos 90 dólares al mes, según Taiwan Asset Management Corp, que gestiona el espacio de oficinas. La empresa se registró en Taiwán en abril, y entre sus actividades cotizadas figuran la venta de equipos de telecomunicaciones, la consultoría y la traducción.
En Hungría, BAC Consulting se registró en 2022 para llevar a cabo docenas de actividades empresariales que van desde la venta de dispositivos de telecomunicaciones hasta la producción de juegos de ordenador. Registrada en una tranquila zona residencial de Budapest, la capital húngara, la empresa tuvo unas ventas el año pasado de unos 600.000 dólares.
Un agente de policía intentando entrar en una oficina de Gold Apollo, en Taiwán, donde comenzó el rastro del busca.
Sólo una persona estaba registrada como única empleada y directora ejecutiva, una mujer llamada Cristiana Bársony-Arcidiacono, que cuenta con un historial complicado y de gran alcance. Una cuenta de LinkedIn de Bársony-Arcidiacono la describe como experta en evaluación de financiación para la Comisión Europea. La cuenta dice que hizo prácticas para el Organismo Internacional de la Energía Atómica en 2008-09. Bársony-Arcidiacono no respondió a las solicitudes de comentarios.
Las personas que dijeron conocer a Bársony-Arcidiacono la describieron como una figura escurridiza que a menudo aparecía durante tramos de tiempo y luego se marchaba. En Budapest, conocidos de Bársony-Arcidiacono dijeron que tenía un dominio vacilante del húngaro, se interesaba por el dibujo, viajaba a menudo y no se la había visto desde principios de año.
A mediados de semana, la página web de BAC Consulting había sido desconectada.
Un edificio de oficinas en Budapest donde se dice que está registrada BAC Consulting.
Zoltán Kovács, portavoz del gobierno húngaro, dijo que la empresa es un intermediario comercial. Dijo que no tenía ningún centro de fabricación en Hungría y que los localizadores nunca habían estado en Hungría.
Más empresas y países
Un medio de comunicación húngaro, Telex.hu, informó de que una empresa búlgara conocida como Norta Global Ltd. había vendido localizadores a Hezbolá. Las autoridades búlgaras abrieron inmediatamente una investigación sobre la empresa, que fue registrada en la capital, Sofía, por un ciudadano noruego en abril de 2022, un mes antes de que BAC fuera registrada en Hungría.
Desde entonces, Norta Global ha transferido un total de 1,6 millones de euros, equivalentes a 1,8 millones de dólares, a BAC Consulting, según personas familiarizadas con la investigación búlgara.
La agencia de seguridad estatal búlgara afirmó que en Bulgaria no se fabricaban, importaban o exportaban buscas como los que explotaron la semana pasada, pero que estaba investigando la implicación de la empresa.
La actividad de la empresa figura como “gestión de proyectos tecnológicos”, según el registro de empresas de Bulgaria. Pero poco sobre Norta Global sugiere que fuera muy activa en Bulgaria.
La empresa no tiene empleados inscritos y está registrada en la misma dirección del centro de Sofía que otras 200 empresas aproximadamente. La dirección de correo electrónico de la empresa utiliza un proveedor de servicios de correo electrónico búlgaro gratuito. Su número de teléfono registrado es noruego y salta directamente al buzón de voz.
Un edificio donde tiene su sede Norta Global, en Sofía, Bulgaria.
El año pasado la empresa tuvo unos ingresos de unos 750.000 dólares por actividades de consultoría, según los datos del registro, y no obtuvo beneficios.
La página web de la empresa había sido desconectada el jueves. Una versión archivada anunciaba servicios que incluían consultoría, integración tecnológica, contratación y subcontratación.
“¿Busca una empresa ágil que le ayude a triunfar o a encontrar esa solución tecnológica a su medida? No busque más”, rezaba la página web.
La agencia de seguridad búlgara afirmó que la empresa no realizaba operaciones financieras incluidas en las leyes antiterroristas y que no tenía tratos comerciales con personas sancionadas.
Norta Global está dirigida por un ciudadano noruego que figura como Rinson Jose en los documentos corporativos. En un perfil de LinkedIn con el mismo nombre, Jose figura como “empresario” en NortaLink, con sede en Oslo, que ofrece servicios de consultoría tecnológica. La URL de su sitio web no está actualmente en uso.
La policía de Oslo dijo el jueves que se había iniciado una investigación sobre el caso. Ni Norta Global ni Jose respondieron a las peticiones de comentarios.
* Dov Lieber en Tel Aviv y Benoit Faucon en Londres contribuyeron a este artículo.
* Artículo original: “The Mysterious Trail of Hezbollah’s Exploding Pagers”. Traducción: ‘Hypermedia Magazine’.
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