Las Fuerzas Armadas bielorrusas se han incrementado su arsenal bélico con la incorporación del MLRS “Polonez-M”. Este sistema, considerado un formidable competidor del HIMARS estadounidense, es capaz de alcanzar hasta ocho objetivos simultáneamente, con un alcance de ataque de hasta 300 kilómetros.
Desarrollado como una variante mejorada del sistema “Polonez” preexistente, el viaje del “Polonez-M” comenzó en 2016. Un año después de comenzar su desarrollo, el sistema se sometió a sus pruebas de fuego inaugurales. En 2018, había cosechado la confianza suficiente para que se recomendara su incorporación al arsenal militar bielorruso.
Los analistas militares destacan la posible incorporación de conocimientos tecnológicos chinos en el desarrollo del “Polonez-M”. Aunque la proporción exacta de componentes chinos sigue sin revelarse, existe un consenso en la comunidad de defensa sobre la localización de estas tecnologías en Bielorrusia. El “Polonez” original utilizaba cohetes A200, y se cree que el “Polonez-M” actualizado incorporó los misiles táctico-operativos M-20, presumiblemente un producto de la innovación china en defensa.
Tecnología y capacidades
Montados sobre el robusto chasis MZKT-7930 “Astrolog”, los vehículos de combate “Polonez-M” demuestran una potencia y versatilidad formidables. Este chasis es un territorio familiar para los militares rusos, ya que constituye la base de diversos sistemas de armas como el complejo de misiles “Iskander”.
El sistema “Polonez-M” está equipado para garantizar una comunicación sin fisuras en un radio de acción de hasta 30 kilómetros en modo estacionario y de hasta 10 kilómetros en movimiento. La tripulación operativa, compuesta por cuatro miembros, puede mantener operaciones de combate hasta 48 horas.
La capacidad de ataque del MLRS es notable: puede lanzar ocho cohetes contra ocho objetivos distintos en apenas 50 segundos, con un tiempo de preparación inferior a ocho minutos. Su objetivo principal es incapacitar los centros de mando, depósitos de municiones, aeródromos y concentraciones de fuerzas y equipos del enemigo.
Por supuesto. Profundicemos en las propiedades técnicas del sistema de lanzamiento múltiple de cohetes (MLRS) “Polonez-M”, un avance significativo en la tecnología militar bielorrusa, que marca un notable desarrollo en sus capacidades de defensa.
Características técnicas
Plataforma de lanzamiento y movilidad
- El “Polonez-M” está montado sobre el chasis MZKT-7930 “Astrolog”, un potente tractor de ruedas 8×8 conocido por su robustez y alta movilidad.
- Este chasis también es utilizado por otros sistemas militares de alto perfil, incluido el complejo de misiles táctico-operativos “Iskander”, lo que subraya su fiabilidad y versatilidad.
Especificaciones de los cohetes
- El sistema utiliza principalmente cohetes de calibre 301 mm, concretamente los tipos A200 y A300, conocidos por sus capacidades de largo alcance.
- El cohete A200 tiene una longitud de 7264 mm y una envergadura de 615 mm, con un peso total de la ojiva de unos 750 kg.
Alcance de combate y carga útil
- El “Polonez-M” posee un impresionante alcance de combate, capaz de alcanzar objetivos situados a una distancia de hasta 300 kilómetros.
- Puede transportar y lanzar hasta ocho cohetes en una sola salva, lo que permite atacar simultáneamente varios objetivos.
Guiado y precisión
- El sistema emplea un mecanismo de guiado combinado: inercial con corrección por satélite (GPS), lo que aumenta su precisión.
- El error circular probable (CEP) de las ojivas a alcance máximo varía de 30 a 50 metros, lo que indica un alto nivel de precisión para ataques de largo alcance.
Disponibilidad operativa y tripulación
- El “Polonez-M” puede prepararse para el lanzamiento de una salva completa en sólo 8 minutos, lo que demuestra su capacidad de respuesta rápida.
- Una tripulación de cuatro personas puede operar el sistema y es capaz de funcionar de forma continua hasta 48 horas.
Comunicación y control
- El aparato de control instalado en el vehículo de mando facilita la comunicación con los vehículos de combate, de transporte de carga y de mando hasta 10 kilómetros en movimiento y hasta 30 kilómetros en reposo.
Otras capacidades de munición
- Además de los cohetes primarios, el sistema también está diseñado para desplegar misiles táctico-operativos, como el M-20, ampliando potencialmente su versatilidad táctica.
Ataque a objetivos y potencia de fuego
- El MLRS puede lanzar una salva de ocho cohetes contra ocho objetivos diferentes en tan sólo 50 segundos, demostrando una formidable potencia de fuego y una rápida capacidad de intervención en objetivos.
Importancia estratégica y operativa
Los atributos técnicos del “Polonez-M” lo sitúan como un sistema de armas altamente capaz y versátil en la guerra moderna. Su capacidad de ataque de largo alcance, combinada con un guiado de precisión, lo convierte en una herramienta formidable para atacar diversos objetivos estratégicos, como centros de mando, depósitos logísticos e infraestructuras clave. El despliegue rápido y la capacidad de salva permiten una respuesta eficaz y ataques de saturación en escenarios de conflicto.
Además, la integración de sistemas de guiado avanzados y el uso potencial de municiones variadas, incluidas las desarrolladas mediante colaboraciones internacionales, subrayan al “Polonez-M” como símbolo del avance tecnológico en las capacidades de defensa bielorrusas.
Este desarrollo ha llamado considerablemente la atención a nivel internacional. La revista estadounidense Military Watch Magazine ha elogiado al “Polonez-M” como el MLRS más potente de Europa, superando incluso a los análogos rusos. Destaca especialmente su alcance de 300 kilómetros, que supera en alcance y potencia a la mayoría de los sistemas de artillería actuales.
La perspectiva rusa
Aunque Rusia cuenta con sus propios sistemas avanzados como el “Iskander” y el “Tornado-S”, los expertos sostienen que el “Polonez-M” ofrece capacidades distintas, especialmente en términos de alcance. Sin embargo, su precisión, con un error circular probable (CEP) de unos 30-90 metros, es inferior al CEP de 20 metros del sistema “Tornado-S”. Cabe destacar que el sistema bielorruso alberga un máximo de ocho misiles por unidad, en contraste con los doce del “Tornado-S” ruso.
El despliegue acelerado del “Polonez-M” por parte de Bielorrusia se considera un movimiento estratégico para mantener la paridad militar, especialmente teniendo en cuenta la adquisición por parte de Polonia de los sistemas HIMARS estadounidenses. Esta evolución podría remodelar el panorama militar en Europa del Este, introduciendo nuevas dinámicas en la ecuación de poder de la región.
Cuba y el equilibrio militar regional
Recientes conversaciones indican que el Ejército cubano está interesado en adquirir los misiles “Polonez-M”, de Bielorrusia. Los misiles, están siendo negociados para su compra por parte de Cuba. Las conversaciones de adquisición se están produciendo al margen de un acuerdo de cooperación con Minsk que fue acordado durante una reunión en La Habana.
La agencia de noticias Belta informó que el interés de Cuba en estos misiles es parte de un plan bilateral fijado para ser ejecutado a partir de 2024. La venta de los “Polonez-M” tiene una importancia geoestratégica significativa, especialmente en el contexto del conflicto en curso entre Rusia y Ucrania, y la participación indirecta de China, ya que las armas se fabrican realmente allí.
A pesar de los desmentidos oficiales de Minsk, hay pruebas que sugieren que Bielorrusia sólo es responsable del ensamblaje final de estos misiles, siendo China quien proporciona las armas reales. Esto ha llevado a la especulación sobre si Bielorrusia posee realmente estos misiles en su arsenal, ya que sólo los lanzadores fueron vistos en una ceremonia a la que asistieron oficiales militares bielorrusos.
Los misiles “Polonez-M” son reconocidos por su letalidad, comparable a los sistemas de armas de Rusia y los países de la OTAN. Cada misil, equipado con un sistema de navegación inercial con corrección por satélite, mide 7,26 metros de longitud y pesa 750 kilogramos, incluida una ojiva explosiva de 140 kilogramos. Los lanzamisiles pueden transportar ocho misiles y tienen la capacidad de dispararlos en un lapso de 50 segundos, necesitando un tiempo de preparación de dos minutos y un tiempo de recarga de 20 minutos.
La incorporación del “Polonez-M” a las Fuerzas Armadas cubanas supone un salto significativo en las capacidades militares del país. Al tiempo que refuerza el arsenal de defensa, añade una nueva capa de tensión a las relaciones con Estados Unidos. La forma en que esta evolución influya en la estabilidad regional y en las estrategias militares de los países vecinos, dependerá del grado de amenaza que signifique para las bases asentadas al sur de Florida, el emplazamiento de los “Polonez-M” a solo 180 kilómetros de sus territorios.
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