El senador Bob Menéndez, de 70 años, envuelto en una batalla legal por graves acusaciones, planea atribuir sus acciones al pasado de su familia, que huyó de Cuba. Menéndez se enfrenta a 16 cargos penales, entre ellos fraude electrónico, extorsión, obstrucción a la justicia y conspiración para actuar como agente extranjero de Qatar y Egipto. Los fiscales alegan que Menéndez recibió sobornos en forma de lingotes de oro, casi 500.000 dólares en efectivo y un lujoso Mercedes descapotable, que supuestamente estaban escondidos en su casa de Englewood Cliffs, que compartía con su segunda esposa, Nadine Arslanian Menéndez.
Arslanian, casada con Menéndez desde 2020, también está acusada y será juzgada por separado en julio. Menéndez, Arslanian y sus coacusados, los empresarios de Nueva Jersey, Fred Daibes y Wael Hanna, niegan todos los cargos. Si es declarado culpable, Menéndez podría ser expulsado del Senado y ser condenado a 200 años de prisión.
El juez de distrito de Estados Unidos, Sidney Stein, advirtió a los posibles jurados de que el juicio podría prolongarse hasta siete semanas. Aunque no está claro si Menéndez testificará, ya han surgido elementos de su estrategia de defensa. El jurado escuchará a dos testigos expertos sobre cómo la huida de Cuba de sus padres a principios de los años 50 ha marcado su vida, a pesar de haber nacido en Nueva York en 1954. Se espera que la psiquiatra Karen Rosenbaum testifique que Menéndez sufrió un “trastorno de estrés postraumático intergeneracional” debido a dos “acontecimientos traumáticos significativos”.
Documentos judiciales revelan que a la familia de Menéndez, como refugiados, le fueron confiscados sus fondos por el gobierno cubano, dejándoles sólo con una pequeña cantidad de dinero en efectivo escondida en casa. Sin embargo, Menéndez ha proporcionado diversas versiones de la salida de sus padres de Cuba. En 1980, declaró al Jersey Journal que su padre, Mario, era un ministro del Gobierno que preveía problemas políticos. Por el contrario, en una entrevista de 2014 con el Jewish Standard, Menéndez atribuyó la decisión de marcharse a su madre, describiendo a sus padres como “gente trabajadora corriente”.
En la entrevista de 2014, Menéndez declaró: “A mi madre no le gustaba [Fulgencio] Batista. No le gustaba lo que veía en las montañas, con los señores del ganado, y no le gustaba lo que temía que se avecinaba. No tenían mucho, pero lo que tenían estaba en Cuba. Y ella dijo: ‘O te vienes con nosotros o te dejamos atrás’”. Los registros públicos confirman que su madre, Evangelina López Menéndez, abandonó Cuba a principios de la década de 1950.
Sharon Fairley, experta jurídica de la Facultad de Derecho de la Universidad de Chicago, comentó: “Estoy segura de que el gobierno va a querer demostrar que todo lo que dice Menéndez es correcto”.
La defensa de Menéndez también puede incluir el trauma por la muerte de su padre. Documentos judiciales revelan que Mario Menéndez, descrito como un “jugador compulsivo”, se suicidó cuando Menéndez dejó de pagar sus deudas de juego. Los registros públicos indican que Mario Menéndez murió en Hoboken el 1 de junio de 1978, a los 63 años. Los abogados de Menéndez argumentan que estos traumas le llevaron a atesorar dinero en casa como “mecanismo de supervivencia” debido a un “miedo a la escasez.”
El senador también podría alegar que su esposa le presentó a sus coacusados, y los documentos judiciales sugieren que podría argumentar que Arslanian “ocultó información”, haciéndole creer que aceptar lingotes de oro y dinero en efectivo a cambio de favores políticos no era ilegal. Sus abogados no respondieron a las peticiones de comentarios.
Menéndez se enfrentó previamente a un juicio federal por corrupción en 2017, acusado de aceptar lujosos viajes al Caribe del benefactor Salmon Melgen, un oftalmólogo de Palm Beach. El caso terminó en un juicio nulo, y el Departamento de Justicia retiró los cargos después de que el Tribunal Supremo redujera la definición de soborno. Melgen fue condenado posteriormente por fraude al Medicare e indultado por el entonces presidente Donald Trump.
A medida que se desarrolle el juicio, la defensa se centrará en la historia familiar y el trauma personal de Menéndez, lo que podría sentar un precedente en casos de corrupción de alto perfil.
Ósip Mandelstam: la destrucción de un poeta
En la noche del 16 al 17 de mayo de 1934, los agentes de la OGPU Guerásimov, Vepríntsev y Zablovski cumplieron una misión en el piso de Mandelstam en Moscú, en el apartamento 26 del número 5 de la calle Nashokinski.