Annette Bening se mete en el papel de Diana Nyad
El nuevo drama biográfico de Netflix, “Nyad”, lleva a la gran pantalla la impresionante historia de Diana Nyad, cuyo nombre se convirtió en sinónimo de perseverancia y del indomable espíritu de la resistencia humana. Annette Bening, que encarna a Nyad, ofrece un retrato impregnado de la fuerza de voluntad que impulsó a la nadadora de maratón a través de una de las travesías oceánicas más difíciles del mundo.
La película se estrena una década después de la travesía a nado de Nyad desde La Habana (Cuba) hasta Key West (Florida), un testamento de 110 millas a la capacidad humana que aún resuena en el mundo del deporte y más allá. La travesía, completada cuando Nyad tenía 60 años, echó por tierra las nociones convencionales sobre las limitaciones de la edad y la resistencia física.
Una vida menos corriente
La historia de Diana Nyad está llena de hitos extraordinarios y luchas encarnizadas, tanto en el agua como en la vida. Nacida en Nueva York, Nyad fue adoptada más tarde por el segundo marido de su madre y se trasladó a Florida, donde dio sus primeras brazadas hacia la grandeza. Bajo la dirección del olímpico Jack Nelson, se convirtió en campeona estatal y luego en sensación nacional en la década de 1970. Sus exitosos maratones de natación se vieron salpicados de apariciones en los medios de comunicación, lo que aumentó su visibilidad e impacto en el deporte.
La vida de Nyad tomó un rumbo diferente cuando se retiró de la natación de competición y se aventuró en el periodismo deportivo. Su voz se abrió camino en la prensa escrita, los informativos matinales y la radio pública, ampliando su influencia más allá de los confines de los estadios deportivos. A lo largo de su trayectoria, Nyad ha hablado abiertamente de su orientación sexual y se ha convertido en defensora de la inclusión en el deporte, evolucionando sus opiniones con el tiempo hasta defender firmemente los derechos de los deportistas transexuales.
Una obsesión de décadas
Aunque los logros de Nyad son muchos, incluidos los récords de natación alrededor de Manhattan y a través del lago Ontario, es la travesía a nado de Cuba a Florida la que ha quedado grabada en la historia. La ruta, conocida por sus condiciones traicioneras y su fauna depredadora, fue conquistada por primera vez por Walter Poenisch en 1978, aunque bajo mucha controversia. La obsesión de Nyad por este tramo del océano comenzó en 1978 con un intento fallido que sentó las bases de una búsqueda que duraría toda la vida.
Su exitosa travesía en 2013, en su quinto intento, fue una clase magistral de tenacidad. Sin la seguridad de una jaula para tiburones, equipada únicamente con un dispositivo electrónico de disuasión y equipo de protección, Nyad emergió tras casi 53 horas en el agua, transmitiendo un mensaje sobre la naturaleza indomable de la esperanza y la importancia de perseguir los sueños, independientemente de la edad.
Entre los bastidores de ‘Nyad’
La película de Netflix no es sólo el relato de un esfuerzo físico, sino que ahonda en el mundo interior de Nyad, sus motivaciones y la resistencia psicológica necesaria para semejante empresa. Adaptada de sus memorias “Find a Way” por la guionista Julia Cox, y dirigida por los ganadores del Oscar Elizabeth Chai Vasarhelyi y Jimmy Chin, la película explora la profundidad del carácter de Nyad, desde sus traumáticas experiencias de agresión sexual hasta su incansable persecución de un sueño aparentemente imposible.
La historia de Nyad, tal como se retrata en la película, también celebra la camaradería y el papel fundamental de Bonnie Stoll, entrenadora, amiga y confidente de Nyad. La implicación de Stoll en los esfuerzos de Nyad en el maratón de natación fue algo más que profesional; fue un vínculo que mostró el lenguaje tácito de apoyo y creencia esencial en cualquier gran esfuerzo.
La repercusión de la hazaña de Nyad
Hoy en día, la vida de Nyad más allá del agua sigue haciéndose eco de su filosofía de la natación. Sus discursos motivacionales y su charla TED resuenan entre quienes quieren superar sus barreras. En el escenario y en la vida, encarna las lecciones aprendidas en sus décadas de natación: que el fracaso es parte integrante del éxito y que nunca es demasiado tarde para embarcarse en nuevos retos.
Con el estreno de “Nyad” en Netflix, se invita a los espectadores a ser testigos de una mirada íntima a la vida de una mujer cuyo legado va más allá de los logros acuáticos. Es una historia de la incansable búsqueda humana de lo aparentemente inalcanzable, y un recordatorio de que la capacidad de grandeza está al alcance de todos los que se atreven a poner a prueba los límites de su potencial.
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