#tallercomplementario con Rosa de la Caridad Cabrera Rodríguez

Presentación 11/12 del #tallercomplementario con estudiantes de arte: un ejercicio tipo encuesta sobre algunas aristas de la trama formativa. Esta vez he seleccionado a Rosa de la Caridad Cabrera Rodríguez.




La enseñanza artística promueve el canje de ideas como lógica de asesoramiento. ¿Qué hay con someter a crítica tus propuestas?

El hecho de someter determinadas propuestas a crítica, implica construcción y mutabilidad de las ideas, con el fin de concebirlas de la mejor manera posible; o sea, con la supuesta finalidad de lograr piezas inteligentes, factibles, que inviten a la reflexión.

Digo “supuesta” porque la crítica está dada desde el conocimiento, la intuición, la sensibilidad y las disyuntivas en la experiencia de cada persona; por lo que tampoco debe ser esquemática.

Por lo general, se abre un campo de retroalimentación donde las partes se ven beneficiadas en mayor o menor medida, dependiendo del aval y la sinceridad de dichas partes. Desde una práctica constructiva, la crítica se basa en fundamentos que apoyan, para compartir diferentes perspectivas. Lamentablemente, también puede tener propiedades corrosivas: por necedad, hipocresía, egoísmo o complacencia. De ahí la importancia del criterio propio, para saber hallar opiniones certeras y responsables, disgregando lo eficaz de lo que no lo es.

Una crítica fuerte no debe ser tomada a mal; si realmente es sincera, puede resultar más útil que una crítica carente de sustancia, que en apariencia te acaricia.

Lo que sí está claro, simplemente, es que este proceso es necesario.



Rosa de la Caridad Cabrera Rodríguez, proyecto sin título (Arqueología del paisaje), 2020.


Se especula sobre mayor vulnerabilidad del alumnado al plagio. ¿Es algo que tengas en cuenta?

Existe el mito, y por tanto la sospecha. Uno es juzgado y criticado cuando claras coincidencias con la obra de un artista reconocido están a la vista de todos. Pero ante un principiante la operación de plagio sería más fácil; y el riesgo, poco o nulo.

En la declaración pública de una idea, de una obra inconclusa o sin muestra oficial, el temor es evidente. En estos casos, es usual la evasión del tema o la expresión de nociones sueltas, sin mostrar nada concreto. La usurpación puede suceder mediante una mirada furtiva, entre los propios compañeros; o quizás, en el peor de los casos, por la mirada de artistas con mayor trayectoria y bagaje (sin hablar desde una vivencia propia).

No es menos cierto que constantemente nos nutrimos de lo que nos circunda; lo vamos archivando consciente o inconscientemente y lo más probable es que se perciba su huella, pero esto no debe pasar de ser un complemento.

La alerta es perspicaz, aunque no debe tornarse una limitación. El intercambio y la socialización de una propuesta son necesarios, de lo contrario no habría evolución de la misma. Además, si bien es cierto que el alumnado es más vulnerable al plagio, cualquier artista también puede serlo; de ahí la tendencia a buscar siempre un respaldo y la concreción de un proyecto.

Creo que, por encima de todo, existe la seguridad de que nadie conoce su trabajo mejor que el propio creador. Nadie mejor que él para defenderlo y hacerlo próspero a largo plazo.



Rosa de la Caridad Cabrera Rodríguez (La Habana, 2000).


¿Te interesa comentar algún proyecto de obra, o exposición? ¿Dónde te gustaría mostrarlo? ¿Qué repercusión esperas?

Entre otras cosas, me encuentro en el desarrollo de un proyecto posiblemente titulado: Arqueología del paisaje. Es la forma de expresión que ha resultado de procesos que a veces se vuelven constantes y reiterativos, hasta hacerse cotidianos.

A través de la recolección de papel o mantas de techo deterioradas (retiradas de alojamientos, empresas, iglesias, escuelas y demás), nace una pieza tridimensional a modo de un corte estratigráfico, como materia compacta. Resulta un paisaje, el nuestro: dormido, precario, estancado, sedimentado. El afán del hombre de transgredir lo perecedero, a través de ese supuesto resguardo que es el techo, inevitablemente vuelve a la tierra, al material parental.

Aunque Arqueología del paisaje formó parte de mi reciente proyecto de graduación en la Academia Nacional de Bellas Artes San Alejandro, es una obra en proceso, en constante formación; depende de la acumulación y el tiempo, como los mismos estratos.

Realmente aún no tengo claro dónde quisiera mostrarla, pero de seguro se hará evidente en el camino y, por supuesto, responderá a las conveniencias que aclame la propia pieza. En cuanto a la repercusión: siempre tiene un margen a lo imprevisto, pero simplemente quisiera lograr inmiscuir al espectador en mis ideas y poder conocer su punto de vista sobre lo que comparto.




Cristian Víctor García Noda

#tallercomplementario con Cristian Víctor García Noda

Evelynn Alvarez

Estoy trabajando en una propuesta audiovisual donde confluyen dos elementos discordantes: un dron y la Plaza de la Revolución. En esta, la noche es el espacio que engendra ficciones. Escribo pequeños textos sobre las piezas, buscando captar más la vibra del proceso que la descripción en sí.