Bodegón con urinario y cráneo de diamantes - Julio Llópiz-Casal

Bodegón con urinario y cráneo de diamantes

La gente adora los objetos porque los desea. Las frutas de una naturaleza muerta dan ganas de cogerlas del cuadro y comerlas. Los sneakers Balenciaga y Yeezy dan ganas de tenerlos, aunque cuesten 1200 dólares; si no puedes permitírtelos, compras imitaciones y punto. Lo mismo pasa con el arte contemporáneo.

Luis Gómez: “Hemos pasado del mundo del arte a la industria del arte” - Julio Llópiz-Casal

Luis Gómez: “Hemos pasado del mundo del arte a la industria del arte”

“Si un artista ha propuesto un nuevo consenso sobre la política, sobre oponerse políticamente en Cuba, todo el que venga detrás está por fuerza dentro de ese consenso. Y mucha gente va a tratar de verlo desde esa mirada del arte, lo cual incluye múltiples entendimientos, desde la referencia hasta lo estético, pero a todos los tomarán en cuenta como arte”.

Carta abierta al cine(cito) cubano - Julio Llopiz-Casal

Carta abierta al cine(cito) cubano

La mano de patadas por el culo que nos van a dar a Lynn Cruz, a Carlos Lechuga, a Miguel Coyula, a Claudia Calviño o a , cuando no le sirvamos al sistema, va a ser con la misma fuerza y con la misma bota. No se trata del Decreto 373. Se trata del 349, del 370, de Palabras a los intelectuales. La cuchilla, cuando baja, baja parejo.

Perdí el Ángel - Julio Llópiz-Casal

Perdí el Ángel

A mí la Revolución me volvió loco. Aquello me pareció una película de acción: gente que bajó de la Sierra y eran como los cowboys pero vestidos de verde olivo, con collares de caracoles y armas largas en vez de revólveres. Para mí era indiscutible que venían a traer justicia a esta tierra”.

Antonia Eiriz o el reflejo de no bajar la cabeza - Julio Llópiz-Casal

Antonia Eiriz o el reflejo de no bajar la cabeza

Mi vicio es hacer lecturas simbólicas de las imágenes y sus coincidencias. A pocos metros de donde estaba parado, se encontraba uno de los mosaicos de la Rampa, en el deplorable estado en que están casi todos hoy. Antonia Eiriz a unos metros de un Ditú y a una cruzada de calle del Pabellón Cuba: casi se me dilatan las pupilas al pensar esto

Balada para la birra - Julio Llópiz-Casal

Balada para la birra

Cuba merece muchas cosas. Podría empezarse por el derecho a una cerveza nacional fría, buena y compartida con un amigo. Entre esa cerveza y el cubano, se interpone solamente el deseo, claro que acechado por la Seguridad.

Bitácora olfativa 23 abajo - Julio Llópiz-Casal

Bitácora olfativa 23 abajo

Las ciudades huelen. Los distintos lugares de las ciudades huelen uno diferente del otro, como las partes del cuerpo. Los pies de la ciudad no huelen como huele detrás de sus orejas. La cabeza de una ciudad no huele como sus axilas, ni como su sexo. La Calle 23 es el vello abdominal del Vedado: se encuentra entre el tórax y el área púbica.

Trabajo de archivo - Julio Llópiz-Casal

Trabajo de archivo

De cara a lo que vivimos, lo que más sentido tiene para los artistas es defender una actitud. Está por verse aún cuán herido o cuán sabio se va a levantar el mundo de este embate. Las maneras de producir objetos artísticos, las maneras de ser un artista, van a cambiar y no sabemos cómo ni cuánto.