Al inicio de la cuarentena tomé la decisión de recogerme en casa junto a mi familia y ausentarme del estudio, para evitar contacto externo.
Tuvimos que reordenarnos en casa y establecer rutinas de tiempo y horarios, ya que convivimos 5 personas: mis suegros, mi esposa, mi niño de dos años y yo. La idea era que todos cuidáramos del niño, repartiéndonos los horarios, y que a la vez todos tuviéramos tiempo para trabajar y para relajar (Netflix, leer, etcétera).
Los últimos días en el estudio, antes del confinamiento, yo estaba inmerso en trabajos de gran formato, pero recordé una serie que había comenzado a concebir a principios de 2019 y pensé que era ideal para desarrollarla en casa. Recogí un caballete de mesa, papeles, acuarelas y pinceles y monté mi estudio improvisado en la mesa del comedor. De modo que durante el confinamiento he estado trabajando en esta serie de acuarelas basadas en mi investigación sobre cultura material.
Todo comenzó con la creación de mis archivos digitales de objetos para los dibujos de la serie de acumulaciones. En el caso de estos nuevos trabajos, he estado compilando figurillas encontradas en Internet para crear retratos / naturalezas muertas.
Cada uno de estos dibujos (8 x 12 pulgadas) tiene el mismo tamaño que la pantalla de mi computadora y se basan en las capturas de pantalla tomadas a estas imágenes. He ido construyendo un mosaico de personajes de origen y significados diversos. La serie, aún en proceso, se titula Screenshots.
Hay una gran incertidumbre respecto al futuro y la reapertura del contexto del arte. Sin duda habrán cambios y reestructuraciones donde la red ocupará un espacio protagónico. De momento, mientras sigamos confinados, trato de afianzarme al instante y, sin negar las dificultades y tristezas de esta situación global, quiero centrarme en continuar produciendo, generando ideas y disfrutando más de mi familia.
Galería
Screenshots – Jairo Alfonso.
Nosotros, los hipocondriacos
Nunca he dejado de ser hipocondriaco. He aprendido, con el tiempo, a sobrellevarlo lo mejor posible y no hacerme caso. Así que se imaginarán cómo me siento con la COVID-19.