Hospitales de Champ-Pourri
En juego de exclusiones, clausuradas las puertas
que conducen a leprosorio, donde se escuchan
enfermos que asisten de lejos, y longitud de
encuadre principia y pierde, las formas de lo
amatorio aún subsisten. Un modo de aislar
venéreas, ya canjeables por el cine, o correccionales
para muchachas en registros inclinadas.
En Lengua los mudos raspan hondo.
Tras ruido prolongado de cerdos (a novela
corresponden porquerizos) recienllegada sus pechos
muestra: una vista de Canto hacia poniente.
Aquellos enfermos escucharon le decir: en tales
hospitales se amarra blando.
Memorias de Turín
Cercano a los relojes o a los nervios: un circular
de Cuervo a ras de Canto, que picotea el
movimiento de una lengua al parecer dormida,
anterior a folletines, dando testimonios de un
invierno en los oídos. Quizás atada por amores de
su hermana, delgaducha, un poco suelta, ungiendo
le las sienes para espantar demonios.
—Infame nibelungo, ahora solo envío telegramas.
En quince días —tal vez menos— es posible
escribir unas memorias, y quitar se un peso de
encima, a pesar de los dientes que a Lengua
encierra: “Porque no tuve conmigo a nadie más
que a Richard Wagner”.
Tratado de los principios
De una multiplicación de ideas o duración que
establece sus propios marcos, un examen de
conversiones en su momento registrado: la
gabardina atravesada por un tajo (de mangas
queda corta, también del cuello), digan se ficciones
que a Realidad penetran.
Queda escrito: colecciona extensiones para fijar
encuentros, grosor de conatos en el cristal de los
lentes (los pule, pule, quedan bien). El chirriar de
la piedra formaliza el cuerpo.
A pesar de lo raro (y lo difícil) manda a las musas
a coger por el orto.
Otro Spinoza mío
Es decir, al conteo de gansos que Boticaria
emprende: “Rabí, rabí, ¿por qué me has
abandonado?”. Se anuncian migraciones al
interior de la mirada, que cojea en intervalos,
dando le alcance a Velocidad misma. De ahí que
salgas, algo enclenque, ensamblando a Sistema en
extensión de los tabiques.
Y pones a pensar a Pensamiento, y llegas al mes
propicio renovando los manteles, o bien en otras
cosas: una araña a la mosca penetrando.
Estas son lecciones no aprendidas: hay un cuerpo
(un par de lentes), en país de abajo Rebeca
maldice.
Amy Lowell
La isla de Japón en las afueras de Boston. O un
poco de tiempo para palear la nieve, el chorro de
tinta entre los arces.
Metafísica en sus finales
Vaya en control de digresiones, usted, sacando
pecho, escuche al niche que en pujar de los
crepúsculos se ha vuelto Nietzsche. Hay sudores,
Alma fisiológica comprobada en la materia. Ella,
ella. Y aprieta duro: al pan Pound, y al vino Eliot.
Corriges: descartareis Abril porque es inicio.
Mejor noviembre: páginas escritas en un idioma
de renglones abortado, sin permitir las resonancias
del eco.
Estas son historias de escisiones: un niche en lo
que Nietzsche sea corregido.
Diréis que es montaje, que en la distancia donde el
frío media el soplo, incluso el cine.
Acumulación significante
Una dispersión en lo que el hueso: golpe seco en
iniciar de movimientos. Llaman, es Mirada quien
a Ojo escucha, del mismo modo en que narramos
Muerte, o modo único en que narramos Muerte
en varios tomos.
Elí, Elí, cuánto peso en las acciones. De ahí que en
significantes vendidos sean: industria de disfraces
por obreros clausurada, aunque al acontecimiento
un relato no puedan construir le.
Y acontece. Jirones, pliegues, la anterior
postergación en significados cotizando.
Dices, lo que es igual: el egipcio Moisés gagueando
en tierra.
Podatus
Colectan yesca a ras de pasto, acupunturas
incorpóreas: Madame Melancolía abriendo sus
escotes. En tiempo de posguerra: cuarenta acres
y una mula. Ni siquiera hace por cumplir las leyes,
inclinación del notario al contar monedas. Aunque
ya en apuntes quedó escrito: hay que ser moderno
en acumulación de deudas.
Llegan tarde. Visten de pasada para entrar en la
República, así le nombran.
Para rectar en lo invisible de precocidad careces.
¿Serán los de mucha muerte? ¿Ateos resurrectos?
Es lo que precisan: Madame Melancolía con vista
hacia poniente.
Colectan coces, y una mula.
El color de la carne
Diligentes secretarias han bañado al muerto, lo
perfuman. Ensayan cómo desenredar alambres
en las carnes alambrados. Cómo disponer de
Olfato para mirar de cerca, a través de los poros.
Cómo orientar Oído para enfrascar los miasmas.
Hay reclamos expulsados de Libro, según jueces.
Diligentes secretarias lo saben. Nos perfuman.
Saben arrancar esas cercas de alambres que
rodean al muerto (su erección), que impiden el
asedio de lo abstracto, acosado por liendres, hasta
estirar el cuello para acceder a Realidad.
Lo educaron (hay ensayos que confirman) en la
más larga demostración de los olores.
Res cantabile
Si luego de que el perro nos mordiera lo
acariciáramos un rato, colmillo en muslo izquierdo,
renunciando a toda acción, y fuéramos de
amaestrar a nuestras fuerzas para situar las en su
espacio, descentrado, mas centradas ellas en sí
mismas, sin necesidad de relaciones, podríamos
entonces repetir lo: es klingt so wunderlich!
De la oración de Balbuciente he dado fe, de su
descenso matinal entre labriegos, anticipo, también
de las formas que preceden a Materia.
Entre los perros de caza le acomodas, colmillo
en Lengua muerta.
Soy el buey que perdió sus arreos, y va a su
encuentro.
Sobre el concepto vulgar de Tiempo
a Javier Marimón
Sabe el Carnicero de las últimas voluntades de
la Res, sonora, descuartizada por voluntad de
Tiempo que jamás precede a Carnicero, sino
que lo contiene, para así prefigurar la forma de
las reses vivas, anteriores a Pensamiento, sordo,
que ha gobernado por decreto, por definición
melódica que la Lengua alcanza.
De la idea de las reses ajenas a la Mente sabe
Carnicero: nieva largo en los oídos. Está al
corriente, puede intuir las, descuartizar las,
amputar les realidades (coces) de sus voluntades
últimas.
El concepto vulgar de Tiempo así lo dictamina.
Métier
[Ya cansada de copular, Sílaba logra esterilidad]
Que Das Kapital fue escrito con amor no caben dudas –
Sus sílabas copulan
a tutiplén fornican para crear labor –
Eso es génesis –
Hasta preñar a Discurso estéril –
En Tréveris, por amor de tu nombre –
Que Sein und Zeit fue escrito con amor no caben dudas –
Unas a otras sus sílabas se aman
para educar pupilas sus sílabas se aman –
Eso es bello –
Hasta lograr poesía en Auschwitz –
O en hospital de Marsella, en principio era el Verbo –
Acontecimientos de amor, no caben dudas.
Les enfants terribles
[Hide-and-Seek en Treblinka]
Hay un poema en la Mente
Alánimo alánimo –
Y una nana en el Puente
Alánimo alánimo –
Y bajo el Puente hay un Canto
Alánimo alánimo –
Y unos niños jugando
Alánimo alánimo –
Y una Alicia violenta
Alánimo alánimo –
Y unos vientos ventrales
Alánimo alánimo –
Y amable el Aria se eleva
Alánimo alánimo –
Y sedienta la nana se ofrece
Alánimo alánimo –
Y hermosos los niños jugando
Alánimo alánimo –
Y sedienta la nana sedienta
Alánimo alánimo –
Y jugando los niños jugando
Alánimo alánimo –
Y testando está Bulla testando
un poema en la Mente alánimo…
Una temporada en Realidades
[Algunos aseguran que era polaca]
Están por Auschwitz
tomando el sol
bronceadas niñas
ligeras de peso –
Elí, Elí
que desciendan
los bastardos de Cronos
que bajen las reses haladas –
Mariah salió del once:
—Fried potatoes, fried potatoes! –
Aseguran que Venustas
maulló largo
entre los neumas –
Lengüilarga ella
sedienta de polvos.
Danza húngara
[En sol menor, versión para orquesta]
Mucho depende
un escuchar
amarrando se
entre líneas:
yiddish, magiar o transilvano
no pudieron precisar
el idioma del dolor
sí los movimientos
que van mojando sus partes –
(It smells like fish)
Mucho depende
un ajuste de ojos
por soles alumbrados:
para evitar encierro
le cortaron
la lengua
la dejan descansar largo
muy largo
entre botones.
Por senderos de la Vaca ¡muuu!
[Que ya no pertenece a Época estupenda]
Cuando decir «yo» tiene la menor importancia
(o por ende no decir lo)
Cuando Materia se apea en los contornos de lenguaje
en ese afuera que es su propio centro
con velocidades por fechar todavía
de acuerdo al buen Dios de relaciones
(un lipoma en el costado para próximo relieve
según se ordene)
transcurre escena penúltima otra vez y una
otra vez y una
en puntos culminantes que gotean del junco:
Tales sintagmas biológicos
críticos
y por ejemplo
lo que es acomodar se en los pechos de la madre
hasta que cante el gallo, que no es poco –
Cuando decir «yo» tiene la menor importancia
(o por ende: flujo rosáceo entre las reses)
así pasarán las modelos, morosas
así el capital que en barriga acumula:
a c u m u l á n d o s e
(dicho el sujeto, desplazado el «yo»)
Y así
Así.
Hailey City, Idaho
[Antes de penetrar en los mares divinos]
Tres, cuatro, cinco libras de papas
por cinco versos provenzales –
Tres, cuatro, cinco libras de papas
from Hailey City, Idaho –
Una infancia entre tubérculos
o son negroes que pisan fuerte –
Pound potato, me llaman –
Soy un hombre dichoso, sin dudas –
Son negroes que hablan chino
enloquecen las sirenas con sus cantos –
Tres, cuatro, cinco libras de papas
from Hailey City, Idaho.
Phanopoeia
[Qué otra verdad será sino la línea]
Mira la de frente
deja que Verdad se interrogue en tus oídos
(Narcissus, Narcissus, ¿se oye bien?)
Masturba la sano hasta alcanzar la gracia –
—Qué otra razón, Sulamita
sino esta línea de plagios penetrando a Resonancia –
Hoy murió José
(¡Padre! ¡Padre!)
pero han de pasar treinta años o tres minutos
para que podamos decir algo –
Ni siquiera el grosor de los intestinos
o el sumo sacerdote amargando nos la tarde –
Un kilo de lengua para domar a Hysteria:
—Mis clases de esgrima te saldrán baratas
más que un pavo real te saldrán baratas –
Porque habito, si el bonzo quiere –
Little “Ray” Pound: —¡Presente! –
Deja la mostrar se como vino al mundo –
Esta noche en Belén las mulatas gozan
(mil novecientos veintidós)
cañaveral adentro las mulatas gozan –
Saca le punta hasta que asienta el jesuita
qué otra verdad será sino la línea –
No cupo cabeza y lo dejaron vivo, por nocturnos –
Quenitas, amorreos en fila india para ver las en trance –
Liendres cuesta arriba entran desnudos
Escuchan a Sorda entonar sus cantos –
Bostoniana abstemia entre los moros
de mademoiselle Rodge fueron las madres –
O será Comedia en actuar protagónico –
Ay, ese rap shakesperiano por un coro de gagos
Oye lo, eso es penetrar a Melodía –
Ni siquiera el ancho de la vulva
o el nazi pueril amargando nos el polvo –
—Hablan claro, Doctor
en lengua que enamora salivan claro –
(Comedia siempre sale a oscuras)
No está mal para iniciar novicias:
—Agreguen, corrijan
canten largo hasta ganar el ritmo –
—Oye los
en picada caen pitirres hasta manchar los campos
por millones se muestran para tapar los soles –
O es Vater Mao emulando lo que el Ícaro –
Por la gloria del Ícaro en picada
caen
caen –
Mira la de frente, puta madre:
—¡Elí! ¡Elí!
A lume spento
[Napoleón entre los altos]
Más que Pound más que Lezama más que un negro
Napoleón siempre estuvo entre los altos –
A saber, lo mismo en el barrio San Trovasso
que con estrella en la frente o corona de espinas
siempre se rodeó de altos –
Ay cariño, daría lo que Darío
por una princesa treceañera aquí en mis piernas
sea escalera Dogana o esquina Trocadero
en mis piernas por amor de su nombre –
Vi al Mesías suspenderse bajo la noche de Eneas
Como Napoleón entre los altos
bajo la noche del mundo lo vi elevar se –
Más que Pound más que Lezama
tan grande como la de un negro entre los arios –
Oh halo de nardo entre las hembras –
¿Tendría que cambiar me de bando?
¿Escribir un final feliz?
¿Acaso alzar la estola que cubre sus gemidos
para que en Sorge grazne el ganso? –
Donde San Vio cruza al Canal Grande nunca estuve,
al menos en cuerpo presente nunca estuve –
Tampoco en Paris con aguacero, a pesar del testo –
«On, on, on», cruzan los gansos para llamar Salud –
¿Debería pasar me al otro lado
donde Letra es más que Cuerpo
donde Ella gobierna como única presencia? –
«On, on, on», siempre entre los altos –
Más que Pound más que Lezama más que un negro.
IV. Res adentro
Os antigos abriam bois para ver futuro em estructura
de tripa: exércitos em fuga, granizo, rios na cheia,
gente sangrando, espadas fora das bainhas, colheitas,
cidades incendiadas.
Paulo Leminski
Están las reses en Sitio para ser pensadas
Oye las
Aunque a veces por decreto se evaporen –
Lanzadas al fondo ya se muestran
Mugen tranquilas –
Lo que el ojo quiere oír lo traduce en formas:
Regina para los relojes cuando él duerme,
le sienta la barbilla hacia Poniente para ver las pasar –
Dan coces en el Sueño
en cimbrado paso ya se alejan:
—Ay Monsieur, estamos en casa y
tenemos espacio para engordar los muebles,
el tiempo es cosa de ellos,
deja los que hagan bulla hasta dormir las reses –
Dan coces en el Ruido
(Lo hacen bien)
o de Salomón las mujeres sedientas por el Polvo:
Deja que Lengua se distancie de Sentido
Deja la –
—Ay, Monsieur
si supiera lo que cuesta mantener la
hasta en noches claras la perfumo –
Le han retratado entre gendarmes
entre aquellos que no habitan en la página –
Se está escribiendo en la llanura,
hacia Onto y Meta se penetran por mi lengua –
Pueden ver los:
—Sí, Míster Lothar, la conquista inicia en hache dos
(lo sabe Sorge)
no hay rastros de Metáfora,
apenas los seísmos tras los dientes apretando –
—Ay, cariño, será lo que cuesta cien denarios
o cabeza de profeta en bandeja ante el monarca –
El que viene después podrá ocultar se
justo aquí
hasta pegar oído a lo que dice Profecía –
No hay fondo, no hay encuadre
(apenas oye Dante)
masas de lieder en la boca endurecida 320
gimnasia de las moscas penetrando le entre íes –
En Blanco hay ruidos –
Monsieur Alighieri lo asegura:
—Está muerto, a mediados de Onto lo golpearon –
Senté a Significado aquí a mi diestra, algo enclenque
Abiertas las reses convidan los opuestos –
—Son de buen comer, dice cansina –
Con qué gusto el lenguaje empobrece a Referente
como si de Ocultamiento se tratara
330 el alboroto de las yeguas anunciando los desflores:
Santa Liduvina suele practicar lo por
Deus comprendida,
a pesar del goce que oculta en la mirada –
(A veces Oído pretende conocer)
—Funesto regalo, ¿ha escuchado? –
Donde reinan los geómetras abre grande –
Están las reses en Sitio para ser oídas
Res adentro están mirando nos
Rumian solas –
En correspondencia dan coces,
340 postergan sus funciones –
Vuelve a pulir sus vidrios para escuchar de cerca –
Cuestión de habas
o explicación de solo amarrado en interiores
acaso resonancias que según me nombran –
Pacen, pacen
se ajusta la lengua en espesores –
—Quién sabe si al fin nos encontremos.
© Imagen de portada: Pablo de Cuba Soria ante la tumba de Ezra Pound.
Sobre el autor:
Pablo de Cuba Soria (Santiago de Cuba, 1980). Poeta, bibliófilo, editor. Fundador de la editorial Casa Vacía. Ha publicado los cuadernos de poemas De Zaratustra y otros equívocos (Extramuros, La Habana, 2003), El libro del Tío Ez (Itinerantes Paradiso, Miami, 2005), Rizomas (Tranvías Editores, Perú, 2010), Inestable (Editorial Silueta, Miami, 2011), Cantos de Concentración, (Letras Cubanas, La Habana, 2015), Gago Mundo (Casa Vacía, Richmond, 2017), Canto de Concentración (Casa Vacía, Richmond, 2018), Res Adentro (Casa Vacía, Richmond, 2019), Cantabile (Casa Vacía, Richmond, 2020) y Rue de Rome (Casa Vacía, Richmond, 2020). Asimismo, dos libros de ensayos: La última lectura de Orlando: ensayos sobre poesía cubana (Editorial Silueta, Miami, 2015) y La poesía neobarroca o el remolino medusario (Casa Vacía, Richmond, 2021). Su Libro de College Station (Casa Vacía, Richmond, 2017) es una especie de novela improbable, escrita desde/en los territorios de Verso.