La fatalidad demográfica, a la vuelta de décadas y décadas de castrismo “de todo el pueblo”, demostró ser más contrarrevolucionaria que el fantasma de la democracia.
La fatalidad demográfica, a la vuelta de décadas y décadas de castrismo “de todo el pueblo”, demostró ser más contrarrevolucionaria que el fantasma de la democracia.
Israel se ofrece a evacuar a los menores del hospital al-Shifa, de Gaza, en medio de la crisis de combustible y la escalada del conflicto.
Los “estadounidenses accidentales” presentan una demanda solicitando la devolución de su dinero tras renunciar a sus ciudadanías.
“Para poder obtener —soñar— esa libertad, inventar esa libertad, conquistar esa libertad, el hombre saltará siempre el muro o cruzará el mar custodiado”.
En las costas donde se siembra el mangle rojo, / no hay agua dulce. / Cada vez que llega el agua dulce, en una barcaza,/ hay una fiesta.
Un bosque hecho pulpa para que millones de humanos jueguen a ser dioses. Seres que nacen y mueren para ser masa, soporte de signos e ideas. ¿Qué ideas?
“Rawls es quizá el único pensador de los últimos cien años cuyo lugar en el canon del pensamiento político occidental es universalmente aceptado”.
“Es el territorio del zahorí. Hace muchos años yo quise formar parte de ese mundo y me entregaron un péndulo”.
“No estamos aquí para hacer un estudio general de la prostitución intelectual; sino para denunciar la represión”.
La antología El compañero que me atiende (Hypermedia, 2017), de Enrique Del Risco, da constancia de la presencia del “compañero” temible que se infiltra en la vida de los cubanos: una metáfora de la sombra de terror que siempre está persiguiendo y observando.
‘Corrección’ es una entrega de la serie ‘Cosa seria’, una columna de opinión del artista Omar Santana, en ‘Hypermedia Magazine’.
“Hay un problema social por el cual las personas están manifestándose y tomando una decisión que en más de sesenta años no habían tomado. Entonces, se supone que tu Gobierno debe escuchar a las personas y tomar medidas”.
Alpidio Alonso hizo un performance que no pasó a la historia del arte, sino a la historia de la infamia.
“Tuve épocas sin dormir con mi esposo y separada de mis hijos, porque me daba miedo hacerles daño. ¿Y si los mataba con esa corriente? A cada rato sigo sintiendo los fuetazos, pero trato de controlarlos con la pintura, que me calma”.
Regímenes dictatoriales como el de Cuba han perfeccionado la habilidad de comercializar una imagen idealizada que disimula la violación de los derechos humanos, la pobreza y la opresión.
Resulta muy válida y saludable —en tiempos de ensañamiento con las iniciativas privadas de los cubanos en Cuba— la prosperidad y el florecimiento de pequeñas (y “alegales”) empresas especializadas en la realización de videoclips.