Los llamados a excluir, satanizar o desempoderar al MSI, son una estrategia suicida que va contra los intereses de todos los que quieren lograr el fin del sistema totalitario en Cuba. Que el racismo y el elitismo no tengan cabida en la construcción de un nuevo proyecto para la Cuba del futuro, democrática e incluyente.
Estado de resistencia
Estadio en el que permanece la disidencia, la oposición, los intelectuales.
La dictadura del PCC es inconvertible e inadaptable
La mayoría de los actores de la resistencia no violenta en Cuba repiten procedimientos que la práctica ha demostrado inviables en nuestro contexto. A raíz de la huelga de hambre del artista Luis Manuel Otero Alcántara, se han publicado varios artículos que considero apropiado analizar.
La disidencia cubana frente al castrismo
No debemos convertir a la oposición no violenta cubana en otro mito. No debemos idealizar a la oposición, sino presentarla como pudiera presentarse cualquier otra corriente política: con sus características particulares, sus defectos y sus virtudes. Los opositores no son semidioses: son seres humanos que cometen errores.
De cucarachas y de hombres
Luis Manuel Otero Alcántara está de nuevo en huelga de hambre y sed. Esta vez está solo. Su casa ya no está decorada con sus obras, porque la allanaron y se llevaron hasta el más mínimo boceto. Con su ayuno, el artista reclama la devolución de sus piezas, el respeto a sus derechos. Hoy vuelvo a tener miedo.
Iconoclasia de Estado
La huelga de hambre y sed no es una reacción desproporcionada. Ante una realidad social desgarradora, la capacidad movilizadora y los recursos discursivos del Estado cubano están casi agotados. Destruir a Luis Manuel Otero es crear un mártir. El Estado, con toda su fuerza, está en desventaja.
Luis Manuel Otero: el trapiche
Luis Manuel Otero es el artista más constante de mi generación. El que mejor ha sabido darle sentido a sus trabajos desde la actitud y no desde la teoría. Ahora mismo, está dispuesto a lo peor con tal de defender al artista que es, con tal de ejercer un derecho que todos tenemos y que algunos tememos.