Aquella ilusión de que las libertades producen necesariamente objetividad en el pueblo, o por lo menos en la clase intelectual, ya no me anima a escribir para Hypermedia Magazine. A fuerza de leer noticias me siento confundido, mareado. Especialmente ese asunto de la izquierda y la derecha.
Etiqueta: Tiempo de palabra
En el centenario de Eliseo Diego
Habría que repetirlo con todas las sílabas, como un mantra: el 2 de julio de 1920 nace en La Habana Eliseo Diego, uno de los nombres mayores de la lírica del idioma. Útil por siglos, Eliseo Diego es el poeta cubano arquetípico, hijo noble de una época de esplendor de la palabra en la patria.
Por la victoria de la raza negra en el cosmos
Sigo viviendo en un barrio de negros. Hay delincuentes, sí, pero mis conflictos, hasta ahora, son únicamente con los dictadores blancos.
De la palabra fraterna
Hoy en día, gracias a las redes informáticas, pudiera haber un debate y referéndum permanentes sobre todas las cuestiones importantes. Pero a muy poca gente le interesa eso. A la gente les interesa que los especialistas en bienestar público les garanticen el bienestar personal. Para que haya democracia tiene que haber demócratas, y eso es lo que no hay.
Del peligro de la palabra (primera epístola moral a Dania)
Recuerda, Dania, que el primero de mayo de 1933 Martin Heidegger había ingresado en el Partido Nazi. Se ha probado que siguió pagando la cuota hasta que cesaron los últimos bombardeos, por puro pánico, después de haber cavado trincheras y haber sido marginado, vigilado y amenazado hasta el último día del glorioso destino, eso sí, “inexorable”.
Ignacio Agramonte y la libertad de información
Durante los treinta años de lucha por la independencia, se enfrentaron el espíritu democrático de los que propugnaba un cambio verdaderamente revolucionario, y el de los autoritarios y continuadores del atraso español, quienes se impondrían una y otra vez para obstaculizar la conquista de la independencia y, finalmente, construir el socialismo.
De la palabra política
Los discípulos de Varela y Martí jamás lograron convencer a sus compatriotas de que ser ciudadano es mejor que ser proxeneta. Ahora Cuba es una nación chula, que vive del dinero de otras naciones. Yarini ha triunfado.
Los tres líderes de la democracia cubana
La guerra que se hizo sin la guía del demócrata, con demócratas menores reducidos a soldados, con formas republicanas pero sin espíritu de democracia, dio origen a una República repleta de aspirantes a dictadores.
De la palabra pública
En lo que a mí respecta: progreso me sobra, me faltan ganas de matar al policía, por ser escritor soy un perpetuo desclasado, y el sexo lo tengo bajo control a mi edad.