El gobierno alemán ha introducido una nueva política que obliga a los ciudadanos cubanos a adquirir un visado de tránsito cuando transiten por Alemania. Esta iniciativa responde a la oleada de solicitudes de asilo de cubanos en el aeropuerto de Frankfurt. La Embajada de Alemania en La Habana hizo el anuncio el viernes, asegurando que el requisito entró en vigor al día siguiente, 29 de julio.
Según detalló la Embajada alemana, para los ciudadanos cubanos que pretendan navegar a través de la zona de tránsito internacional de un aeropuerto alemán en ruta a un destino no Schengen, un visado de tránsito es ahora un requisito previo. Esta política se ha formulado para frenar la tendencia de los cubanos a adquirir billetes de avión a países exentos de visado, por ejemplo, Dubai, pero con la intención subyacente de solicitar asilo una vez que aterricen en suelo alemán.
Sin embargo, hay excepciones a esta regla. Los individuos cubanos que:
1. Tengan doble nacionalidad con un país Schengen.
2. Tengan en su poder un visado Schengen válido, un visado nacional de estancia de larga duración o un título de estancia de cualquier estado miembro de Schengen.
3. Ser titular de un visado válido para Japón, Canadá o Estados Unidos, o tener la condición de residente en estos países.
no necesitarán visado de tránsito. Los funcionarios alemanes han subrayado la estipulación de que un visado de tránsito aeroportuario no permite a su titular salir de la zona de tránsito del aeropuerto alemán. Si el viaje de un ciudadano cubano implica aventurarse en la jurisdicción de los territorios Schengen, como cambiar de terminal o tomar un vuelo interno Schengen, es obligatorio un visado Schengen.
El origen de esta obligación de visado se remonta al notable aumento de las solicitudes de asilo de cubanos en el aeropuerto de Fráncfort en los últimos meses. Aprovechando una laguna jurídica, los cubanos compraban billetes a países exentos de visado con escala en Fráncfort. Posteriormente, renunciaban a continuar su viaje para solicitar asilo en Alemania. Su motivo oculto: entrar en el espacio Schengen y, en última instancia, establecer su residencia en España.
Al establecer la obligación de visado de tránsito, las autoridades alemanas refuerzan su marco de gestión de fronteras para impedir el uso indebido del canal de asilo por parte de personas que intentan acceder al territorio Schengen de forma fraudulenta. Se trata de un fragmento de una estrategia más amplia de la Unión Europea para mantener la integridad y equidad de sus protocolos de inmigración y asilo.
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