Se agrava la crisis económica cubana

En una serie de apariciones televisivas en horario de máxima audiencia, altos funcionarios cubanos han pintado un sombrío panorama de la creciente crisis económica de la nación, revelando asombrosos detalles sobre la escasez de alimentos y combustible. A medida que el país dependiente de las importaciones entra en su cuarto año de crisis económica, los ministros han informado con franqueza sobre la grave recesión, destacando una caída significativa en los suministros y servicios esenciales.


Puntos clave:

Descenso económico

La crisis, agravada por la falta de divisas y la caída en picado de la producción, ha provocado una drástica reducción de la producción de alimentos, el suministro de productos farmacéuticos y el transporte.

Escasez de alimentos

Según el ministro de Agricultura, Ydael Jesús Pérez, la producción de carne de cerdo, arroz, frijoles y huevos se ha desplomado en más de un 80% en comparación con los niveles anteriores a la crisis.

Escasez de combustible y fertilizantes

El país sólo ha conseguido adquirir el 40% del combustible necesario y apenas el 4% de los fertilizantes necesarios.

Lucha sanitaria

La primera viceministra de Sanidad, Tania Margarita Cruz, reveló una reducción del 30% en las intervenciones quirúrgicas debido a la escasez de suministros médicos básicos. Casi el 68% de los productos farmacéuticos esenciales no están disponibles o su suministro es limitado.

Problemas de transporte

El transporte público, un salvavidas en un país con pocos vehículos privados, está paralizado debido a la escasez de combustible y a las dificultades para adquirir piezas de repuesto. El ministro de Transporte, Eduardo Rodríguez Dávila, constató una drástica reducción de los servicios de autobuses en La Habana.

Desaceleración industrial

La industria opera solo al 35% de su capacidad, y el tráfico nacional de mercancías se ha reducido a la mitad desde 2019.


Antecedentes

La economía de Cuba, fuertemente dependiente de las importaciones de alimentos y combustible, se ha visto duramente afectada por la pandemia de COVID-19, las sanciones de Estados Unidos y un sector turístico tambaleante. El impacto de la pandemia ha mermado las fuentes de ingresos, agravando una situación ya de por sí precaria. La crisis actual representa un declive continuado desde el colapso de la Unión Soviética, antiguo benefactor clave de Cuba.


Respuesta del gobierno

El gobierno cubano, reconociendo la necesidad de una reforma económica, ha puesto en marcha varios programas para abordar estos problemas críticos. Los esfuerzos se centran en aliviar el hambre, mejorar la vivienda y mejorar los sistemas de transporte. Sin embargo, estas iniciativas se ven limitadas por una importante falta de financiación.


Análisis

El economista cubano Omar Everleny expresó sus dudas sobre la posibilidad de crecimiento económico este año, dada la gravedad de la crisis. La cruda realidad presentada por los ministros subraya la urgente necesidad de reformas y apoyo externo para reactivar la economía en dificultades.







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