Las autoridades mexicanas anunciaron el miércoles el exitoso rescate de 31 migrantes, en su mayoría venezolanos, que fueron secuestrados mientras viajaban en autobús hacia la frontera con Estados Unidos. El secuestro se produjo el pasado fin de semana, marcando un peligroso viaje para los migrantes que buscan una vida mejor en Estados Unidos.
El calvario de los migrantes comenzó cuando viajaban de Reynosa a la ciudad fronteriza de Matamoros. Su autobús fue interceptado por hombres armados, sospechosos de pertenecer a cárteles locales de tráfico de drogas y personas. Este traumático incidente pone de relieve los graves riesgos a los que se enfrentan los migrantes, que a menudo son presa de organizaciones delictivas y funcionarios corruptos.
Jesús Ramírez Cuevas, portavoz de la presidencia mexicana, anunció el rescate, afirmando la seguridad de los migrantes y sus exámenes médicos en curso. Sin embargo, los detalles de la operación de rescate siguen sin desvelarse y aún se desconoce la identidad de los secuestradores.
Un avance significativo en el caso se produjo cuando miembros de la Guardia Nacional rescataron a cinco de los migrantes secuestrados el lunes por la noche. Este grupo estaba siendo transportado en un coche en Tamaulipas, abandonado por sus secuestradores. Los rehenes restantes fueron rescatados posteriormente.
El grupo, en el que había mujeres y niños, era una mezcla de ciudadanos venezolanos, colombianos, hondureños y mexicanos. Muchos de ellos se dirigían a Brownsville (Texas) para acudir a una cita con el servicio de inmigración y discutir sus peticiones de asilo.
Este incidente se produce en medio de un aumento de la migración a la frontera sur de Estados Unidos, con una cifra récord de 300 000 migrantes procesados al mes en diciembre, según informó la CBS. El viaje a la frontera está plagado de peligros, como la extorsión y la victimización por parte de bandas criminales.
El gobierno mexicano informó de más de 2100 secuestros de inmigrantes en 2022, lo que indica la creciente amenaza de las bandas de traficantes y los cárteles.
La crisis humanitaria en Cuba se agrava a las puertas de 2024
Por Isabel Díaz
En 2024, Cuba se enfrenta a una grave crisis humanitaria, con enormes urgencias económicas y alarmante desesperación social. La emigración sigue funcionando como única válvula de escape.