¿Será este el momento de Nikki Haley?

En las próximas primarias de New Hampshire, este martes, todas las miradas están puestas en el enfrentamiento crucial entre el ex presidente Donald Trump y Nikki Haley. Esta contienda se perfila como un momento decisivo en la carrera republicana por la nominación presidencial. 

Hay mucho en juego tras la dominante victoria de Trump en los caucus de Iowa. Su triunfo en Iowa ha reducido considerablemente el número de candidatos y le ha colocado como claro favorito. Otra victoria decisiva en Nuevo Hampshire podría prácticamente sellar la candidatura de Trump, lo que le permitiría centrar sus esfuerzos de campaña en las elecciones generales y en el presidente Joe Biden.

Nikki Haley, la última gran aspirante a Trump, considera Nuevo Hampshire un campo de batalla crucial. Su estrategia depende de los republicanos moderados y los votantes independientes del estado, que puedan participar en las primarias. La campaña de Haley ha trabajado incansablemente para influir en estos grupos, consciente de que una buena actuación en Nuevo Hampshire es vital para sostener su candidatura y apaciguar a unos donantes cada vez más inquietos.

En el bando demócrata, el representante por Minnesota, Dean Phillips, está aprovechando la decisión del presidente Biden de no presentarse a las primarias de Nuevo Hampshire y hacerlo únicamente como candidato por escrito. Phillips quiere sacar partido de esta ausencia y espera lograr una buena actuación que podría poner en aprietos a Biden y suscitar más dudas sobre su candidatura a la reelección.

Puntos clave a tener en cuenta

• New Hampshire es una oportunidad importante para Haley, que va por detrás de Trump, pero por un margen más estrecho que en otros estados. El resultado aquí dependerá en gran medida de la participación de los votantes independientes y de los que se han pasado del partido demócrata. Una mala actuación podría ser perjudicial para la campaña de Haley, posiblemente conduciendo a una pérdida de apoyo de los donantes y una rápida consolidación del partido detrás de Trump.

• En contraste con la baja participación en los caucus de Iowa, New Hampshire prevé un número récord de votantes republicanos. El récord anterior de aproximadamente 288 000 votos se estableció durante la campaña presidencial inicial de Trump en 2016. La participación será un indicador crucial, con números más altos que potencialmente favorecerán a Haley.

• Mientras que Biden ha optado por no aparecer en la boleta electoral, Phillips está aprovechando la oportunidad para desafiar al titular. Los funcionarios demócratas han organizado una campaña por escrito para Biden, y los resultados serán observados de cerca para obtener indicaciones de la posición de Biden con el electorado.

• En la pequeña comunidad de Dixville Notch, conocida por su tradición de votar a medianoche, los seis votantes votaron por Haley. Este resultado temprano, aunque no es indicativo de la tendencia más amplia del estado, es un comienzo simbólico de las primarias.

• Después de Nuevo Hampshire, las primarias de Carolina del Sur se perfilan importantes, especialmente para Haley, como nativa del estado y su ex gobernadora. Una derrota en Carolina del Sur podría ser un golpe crítico para su campaña.

Estas primarias de New Hampshire no son sólo una prueba para los candidatos, sino un reflejo del panorama político actual, con implicaciones que podrían dar forma a la carrera presidencial en los próximos meses. 

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