Nepal ha dejado de expedir permisos de trabajo a sus ciudadanos para trabajar en Rusia y Ucrania. Esta decisión se produce tras la muerte de al menos 10 mercenarios nepalíes que servían en el ejército ruso en Ucrania.
Según se informó inicialmente en diciembre de 2023, seis mercenarios nepalíes habían muerto en Ucrania. A raíz de ello, el gobierno nepalí había exigido al gobierno ruso la devolución inmediata de los cadáveres y el pago de indemnizaciones a las familias de los fallecidos.
El ministro de Asuntos Exteriores de Nepal, N. P. Saud, informó a la agencia nacional de noticias RSSde que se considera desaparecidos a unos 100 nepalíes. El embajador nepalí en Moscú, Raj Tuladhar, declaró que aproximadamente entre 150 y 200 nepalíes se unieron al ejército ruso como mercenarios.
Los mercenarios nepalíes, conocidos como “gurkhas”, pueden servir oficialmente en los ejércitos del Reino Unido y la India en virtud de un acuerdo tripartito entre estos países. Sin embargo, no existe tal acuerdo con Rusia, por lo que su reclutamiento en el ejército ruso es motivo de preocupación.
Nepal garantiza el apoyo a sus ciudadanos que trabajan en el extranjero, incluso en casos de emergencia, y la indemnización a las familias en caso de fallecimiento. Las personas reclutadas en el ejército ruso habían salido de Nepal con permisos de trabajo civiles o visados turísticos, por lo que su despliegue como mercenarios militares se considera una violación de la legislación nepalí.
En diciembre de 2023, la policía nepalí detuvo a 10 personas acusadas de enviar a nepalíes desempleados al ejército ruso como mercenarios.
Además, informes internacionales han puesto de relieve actividades de reclutamiento similares en otras regiones. El 28 de febrero de 2023, The Media Line, una publicación en inglés de Oriente Medio, informó de que Rusia estaba reclutando mercenarios palestinos para la guerra contra Ucrania.
Asimismo, el 5 de septiembre, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba reveló el descubrimiento de una red ilegal de reclutamiento de mercenarios a Rusia para la guerra contra Ucrania. Cuba enfatizó su postura contra la participación de mercenarios en conflictos. Tras esta revelación, el Ministerio del Interior cubano informó el 8 de septiembre de que habían comenzado las detenciones de los implicados en la red de reclutamiento. La fuente de información InformNapalm señaló que a los mercenarios cubanos se les pagaba 2000 dólares al mes.
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