Al pueblo cubano se le juntó el hambre con las ganas de comer, y después de 62 años, 6 meses y 10 días de sufrimiento dijo “¡hasta aquí las clases!”.
No me hables del Saratoga, háblame de mi Habana
¡No hablen más del hotel! No hablen del inmueble si de edificios icónicos y destruidos está llena La Habana. No hablen de los servicios que iba a comenzar a brindar, cuando en realidad esos servicios no iban a estar dirigidos al turismo nacional y mucho menos al pueblo.
Mi Habana 502
Mi Habana tal vez comience a ser solo un recuerdo, porque mi Habana, también, fue como una madre sin recursos que al ver que no podía darme un futuro, me dio en adopción para que me marchara en busca de algo mejor.
Ciclos
El ciclo sísmico es un proceso que no solo sirve de alegoría para explicar o entender cómo se ha desarrollado la lucha del pueblo cubano por su libertad, sino también el ciclo nostálgico que sufrimos los exiliados.
El temblor del 11J
Esos 62 años, sumados al hambre, la opresión y a los efectos colaterales de una pandemia, crearon un terremoto de protestas contra la dictadura dentro y fuera del ámbito nacional.