Heberto Padilla aprovechó su condición de chivo expiatorio para protagonizar una farsa que era, también, una llamada de auxilio ante los ojos de Occidente.

Agustín Marquetti / Alain Roca / Ana Fidelia Quirot / Antonio Scull / Armando Capiró / Carlos Tabares / Danel Castro / Dayron Robles / Diosbelys Hurtado / Eduardo Paret / Frank Sánchez / Germán Mesa / Ihosvany Hernández / Javier Sotomayor / Juan Padilla / Lázaro de la Torre / Lázaro Junco / Lázaro Valle / Luis Alberto Orta / Luis Giraldo Casanova / Maikel Chang / Maikro Romero / Mario Kindelán / Mireya Luis / Nirio Rivero / Omara Durand y Yunior Kindelán / Orlando Samuels / Pedro Medina / Pedro Orlando Reyes / Raúl Diago / René Navarro / Reutilio Hurtado / Rey Vicente Anglada / Robeisy «el Tren» Ramírez / Robertlandy Simón / Rogelio García / Silvio Leonard / Yadel Martí / Yamilé Aldama / Yordenis Ugás.
Heberto Padilla aprovechó su condición de chivo expiatorio para protagonizar una farsa que era, también, una llamada de auxilio ante los ojos de Occidente.
Podría ser La Lupe, poco antes de exiliarse hacia su ‘larghetta e spiritosa’ conversión evangélica. O Daisy Granados, que apenas estrenaba su carrera como diva del Titóntalitarismo insular. En cualquier caso, es idéntica a una de esas ninfas analfabetas que pululan por las novelas trestristestigresinas de Guillermo Cabrera Infante.
Carlos A. Aguilera es el editor invitado de ‘La guerra aún no ha comenzado’, una edición especial para Documenta 15, de la revista ‘No Country Magazine’ (un proyecto editorial de las publicaciones ‘Rialta’ y ‘El Estornudo’).
La frontera estadounidense registra un aumento de migrantes procedentes de Asia y África, triplicándose las detenciones a medida que se expanden las redes mundiales de contrabando.
Israel se enfrenta a la presión mundial para lograr un alto al fuego en Gaza en medio del creciente número de víctimas civiles.
La izquierda latinoamericana endurece su postura contra Israel en medio del conflicto. Bolivia corta las relaciones diplomáticas y Colombia equipara las acciones al régimen nazi.
Como un mirarse de frente. Como un cuidarnos la espalda. Como un tocarse a dúo desde la pura presencia humana.
Trump eclipsa a DeSantis en la cumbre del Partido Republicano de Florida, recabando apoyos y revelando respaldos clave de cara a 2024.
Un ataque israelí contra un campo de Gaza causa 38 muertos; las conversaciones sobre el alto al fuego se estancan.
Si un rasgo alcanza a definir este nuevo hacer de Santiago Torralba, ese es, sin duda alguna, la identidad distorsionada.
A Luis Manuel Otero le debemos, cuando menos, dos cosas: la restitución de un diálogo crítico con el poder, y haberle dado nitidez al peor rostro del censor totalitario.
Ginés Liébana es un tipo pervertido y perverso. Lo es porque mientras que otros se dedican a citar o a reverenciar al modelo de la fascinación y de la admiración, él fagocita, expolia y redefine esa usurpación de los maestros de ayer para convertirse en un Dandi de hoy.
José Alberto Lezcano no sostiene con las películas que ama una relación posesiva, y las que detesta tampoco las echa a los perros. En cuestiones cinéfilas puede ser colocado a la altura de Guillermo Cabrera Infante y Eduardo Manet.