Todas mis patrias arraigan en mí. No hay bandera, himno o geografía que las nombre completas, ni frontera que alcance a limitarlas. Dos patrias tuvo el poeta. Mas no eran menos por ser más de una, ni eran mejores, ni más puras, ni exclusivas. Patria es también la poesía. Patria es también el horizonte.
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La sociedad civil, la administración Biden y el cuento de la buena pipa
El Estado cubano, en franca descomposición, pondrá zancadillas a la administración Biden-Harris en su cometido de seguir el camino abierto por Barack Obama. Lo hará hasta el último estertor, porque de ello depende su sobrevivencia, porque el poder totalitario depende de una ideología que justifique la nación en pie de guerra.
Raychel Carrión: “La multiplicidad es inquietante para el poder”
“El compromiso desde lo que no nos pueden quitar: la capacidad creativa y la libertad de pensamiento, lo hemos visto y se ha vivido hace poco, el pasado 27 de noviembre. Si los creadores están en la frecuencia del presente, entonces el poder se quiebra. Eso es lo que mejor podría hacer un arte contemporáneo inclusivo”.
El deseo clandestino y las jóvenes artistas cubanas
En la lectura de poesía de la joven curadora Carolina Barrero, o cuando Camila Lobón insiste en la separación entre Estado y sociedad, el deseo tiene la fuerza capaz de desficcionalizar al Estado total. La esencia del gesto genera un saber que habita en un umbral por el cual se regeneran formas de crear, imaginar, y estar juntos.
Horror y Ministerio
Es más fácil relacionarlo todo con Estados Unidos, “nuestro enemigo histórico”, y aunque muchos jóvenes sabemos que nada de eso es cierto, ese cuento se lo han embutido a nuestros padres y abuelos como polluelo en nido, y algunos son hasta capaces de picarnos la cara por defender el absurdo establishment.
La Revolución de los hijos
Nuestros dirigentes tienen mucho que aprender. Algunos están a tiempo. Solo hay que poner las manos atrás, como cuando se entra a un museo. Escuchar y quitarse la careta. Sincerarse y decir: “Sí, sé que en este momento la policía está dando golpes, pero yo no puedo hacer nada, porque tengo miedo, porque también tengo una hija”.
El autobús mágico
Dentro de ese autobús, los policías intimidaron, golpearon, gritaron, arrebataron pertenencias. Probablemente aquella guagua, después de las 12, volvió a ser una calabaza. Y ellos tal vez volvieron a ser ratones. Ojalá que se trate de miedo e indolencia, que siempre son enmendables. Yo necesito creer que así es.
Política y autocracia: entre lo preferible y lo detestable
En sociedades proletarizadas y represivas, los activistas sufren el triple fardo de la represión gubernamental, la insolidaridad de sus pares globales y los listones normativos de quienes, desde la opinión pública, les reprochan no elegir mejores aliados. No cuidar sus palabras. No ser un arquetipo de pureza política.
Cuba: De la Revolución al Estado mafioso postcomunista
Queridos cubanos que me leen, lo que estamos viendo no es una versión criolla de la perestroika, como afirman muchos por ahí, sino la consolidación de lo que el húngaro Bálint Magyar ha llamado “Estado mafioso postcomunista”. El término “mafia” no es sensacionalista, ni ideológico. Tampoco un insulto barato.
Mejor no es callarse
No se defiende una idea, ni una Revolución que presume de su vigor y su estabilidad, con acosos, insultos, agentes que hostigan a mujeres, prisiones domiciliarias forzadas, calumnias. Ojalá las palabras se abran paso sin carros de la policía, ni detenciones, ni secuestros de teléfonos móviles, ni amenazas, ni violencia física.









