De gusanos a mariposas es el pensamiento liberador y sin complejos que han asumido los que disienten con el poder en Cuba. Entiéndase por gusano ese término peyorativo utilizado para clasificar y estigmatizar a la persona que disiente ideológicamente o critica a la Revolución.
Hoy, se ha comenzado a plantear en alta voz una necesaria transformación. El murmullo temeroso, el hablar bajito se han transformado en charla y esa charla en un grito de reclamo inequívoco que aboga por un país más plural y democrático.
Este deseo de pluralidad que existió siempre en unas minorías fue acallado durante mucho tiempo por esa maquinaria política de difamación mediática hacia los discrepantes. Si eras señalado como disidente solo te quedaba el ostracismo o formar parte del exilio. Hoy lamentamos la inmensa soledad en que transcurrió la valentía de esos pocos que se atrevieron a cuestionar el poder.
Si para algo ha servido el fenómeno reciente de la conectividad en la Isla, es, precisamente, para romper el aislamiento e interconectar los criterios en apariencia solitarios que vagaban muchas veces errantes dentro de Cuba. Estar conectados ha servido para no estar tan solos, para visibilizar a esos que un día fueron unos pocos; pero hoy ya somos muchos los que nos atrevemos desde ámbitos distintos a reclamar aquello de lo que nunca se nos debió expropiar: el derecho a ser libres pensadores y la posibilidad de ejercerlo.
En los últimos años, la cultura y la intelectualidad cubanas han sostenido una postura crítica ante la actitud totalitaria del Estado, han puesto en evidencia el atropello a los derechos individuales. Fenómenos como el Movimiento San Isidro o el 27N mostraron a unos jóvenes que solo querían, y quieren, de forma pacífica y cívica dialogar para transformar su país en un mejor hogar.
Muchos ciudadanos se reconocieron en esa sentada frente al Ministerio de Cultura, lo que no fuimos capaces de prever era la forma de diálogo que sostendría el Estado con esos jóvenes. Poner en evidencia la intolerancia, así como la flacidez ideológica que demostró el Estado, hizo que desde el Gobierno se diera una respuesta totalitaria.
Totalitarismo: Se considera a un régimen político en el que un partido único ejerce un control casi completo sobre la vida pública y privada de los ciudadanos. Mediante el control de los medios de información y de comunicación, los regímenes totalitarios ejercen una fuerte influencia sobre la opinión pública, propiciando la formación de un “pensamiento único”, legitimador de las actuaciones del Gobierno. La disidencia política es perseguida y reprimida por los cuerpos policiales o por el ejército, férreamente controlados por el Gobierno.
Pues de este totalitarismo han sido víctimas innumerables personas después del 27N, compañeros de profesión, amigos, desconocidos e incluso exalumnos. Muchos de ellos han tenido que sufrir citaciones policiales, el acoso en sus hogares y, en algunos casos, se les ha prohibido salir de sus domicilios.
En esta situación encontré inesperadamente a una exalumna muy querida, porque en este oficio de la enseñanza no solo te corresponde vomitar contenido; te corresponde educar, te corresponde ser la atalaya de tus alumnos, donde se puedan trepar para ver muchos y distintos horizontes y dejarlos marchar libremente por el camino que les plazca.
Mary Esther es de esas alumnas hoy convertida en una excelente artista y humorista gráfica. Describo a la persona ya que no es un detalle menor. Mujer noble e inquieta que vi luchar durante muchos años para entrar y estudiar en una Escuela de Arte y siempre de la mano de su familia. Fui testigo de su trabajo constante y de la fe que tiene por sus sueños.
Pues esta joven es citada incesantemente por la policía, la acosan y ve violentada la privacidad de su hogar con reprochables actos de repudio legitimados y aupados por el Estado. Su único delito ha sido hacer humor gráfico.
Es solo una artista a la cual la policía amenaza explícitamente y le exige que deje de dibujar con libertad, que no puede representar símbolos patrios o cualquier cosa que entienda el sujeto censor que atenta contra los valores de los revolucionarios. Se le ha apercibido para que no pueda continuar dibujando con libertad; pende sobre ella esa amenaza abierta de “ya sabes a qué atenerte si continúas”.
¿Quién es el sujeto censor del Arte?: una persona con poco o ningún criterio artístico o estético, mas altamente cualificado para hacer cumplir la doctrina que se le ordena.
Pero deseo contextualizar a quien censuran.
Mary Esther se graduó de Escultura en la Academia de Artes Plásticas Eduardo Abela. Siempre le llamó la atención el cómic y la ilustración.
Al publicar su primer cómic en un libro colectivo y tener desde 2006 un libro varado en una editorial cubana, entendió que tenía que buscar otros medios para narrar a través del dibujo sus inquietudes y la realidad imperante.
Encontró en las redes sociales y en los medios de periodismo independiente una oportunidad para desarrollar su obra, manteniendo su libertad creativa y la calidad de sus trabajos.
Mary Esther, junto a otros artistas, hizo que naciera Xel2 (poreldos) un espacio para el cómic en Cuba, desde una plataforma digital y periódica. Su director Wimar, el artista visual Irán Hernández y Mary Esther llevaban años tratando de crear un espacio digital para el cómic donde se pudiese agrupar la obra de artistas cubanos. Para ellos, trabajar para una editorial cubana se les hacía casi imposible, son escasas las publicaciones dedicadas al cómic, además de las limitaciones temáticas que encuentran debido a los criterios editoriales que existen en las publicaciones oficiales.
Estas limitantes y el deseo de contar la realidad de Cuba a partir de dibujos fueron el impulso de Xel2 que, en colaboración con el medio independiente cubano elTOQUE, se hizo realidad en febrero de 2019.
Actualmente son un pequeño equipo de artistas conformado por Ramsés Morales, Brady Izquierdo, Fabián Sotolongo, Alen Lauzán, Irán Hernández, Wimar Verdecia y Mary Esther, junto al equipo editorial de elTOQUE. En su proyecto han colaborado a lo largo de estos casi tres años muchos dibujantes emergentes.
¿Por qué atropellar la libertad creativa de estos jóvenes cuyo único delito es hacer humor con un lápiz?
Solo traducen en humor gráfico el sentir popular y sus pensamientos.
El poder teme a los símbolos y toma conciencia de la habilidad que tiene el Arte para crearlos. Símbolos que unifican a las masas; símbolos que vencen a la retórica política trasnochada y obsoleta.
Temen a los artistas que tienen la capacidad de resumir, de empatizar, de transformar un sentimiento colectivo en imagen, palabra o canción. El arte genera una conexión emocional con la conciencia colectiva y a eso le temen los gobiernos totalitaristas, temen que los artistas los hagan verse como el rey desnudo descubierto por la inocente verdad en medio de la multitud.
Cuba ha de evolucionar y transformarse. Esperemos que pase pronto este gris invierno para que llegue una esperada primavera en la que puedan crecer y volar libre la creatividad de Mary y la de tantos otros artistas.
Galería
‘Apologetic art’ de Arturo Larrea Cárdenas
“Los mejores cuadros de mi vida los quemé. Cuando me dio ese pronto, los lienzos buenos eran los que estaban por delante. La pintura me enseñó a ser consciente de mi diferencia y que mi talento era real. No tengo que demostrarlo a nadie”.