Umberto Peña (La Habana, 6 de diciembre de 1937 – Salamanca, 21 de junio de 2023) fue un artista y diseñador gráfico cubano que enfrentó muchos retos durante su carrera.
Estudió en la Escuela San Alejandro (1954-1958) y en marzo de 1959 se incorporó a la Asociación de Grabadores de Cuba. Después de una estancia en México, en 1960 comienza a trabajar en el Departamento de Cultura del Gobierno Provincial de La Habana e inicia su trabajo como diseñador gráfico en el Departamento de Propaganda del Consejo Nacional de Cultura hasta 1963, cuando durante 20 años ocupa la dirección artística en Casa de las Américas hasta 1983[1].
En 1993 se traslada a México y después a EE. UU., donde reside hasta que en 2006 se muda a Salamanca en España para vivir y seguir creativo hasta que fallece en 2023[2]. Aunque al comienzo de su carrera Umberto Peña y sus obras fueron reconocidos por el gobierno cubano, después fue criticado e ignorado por las autoridades[3].
Declaración de La Habana: 40 xilografías cubanas. Diseño de Esteban G. Ayala. Impresión Ponciano, Habana. Consejo Nacional de Cultura, La Habana, 1961 / Año de la Educación, 35 x 50 cm. (1) Cuba, Sto. Domingo, Nicaragua, México, Texas. (2) Nacionalización. (3) D.H. Los grabados de U. Peña aparecen firmados como “Pu”. A decir por el artista, “El PU es un error inconsciente porque no calculé que saldría al revés, al imprimirlo, en el taco original es uP”. Cortesía KGJ Colección, Ciudad Real, España.
En sus xilografías recogidas en la colección “Declaración de La Habana” en 1961, Umberto Peña aborda temas que forman parte del discurso del gobierno revolucionario, como se describe en las obras: (1) Pueblos que más de una vez han visto invadido su suelo en México, Nicaragua, Haití, Santo Domingo o Cuba, que han perdido ante la voracidad de los imperialistas yanquis, extensas y ricas zonas como Tejas; (2) El derecho de los estados a la nacionalización de los monopolios imperialistas, rescatando así las riquezas y recursos nacionales; (3) Junto a la imagen y el recuerdo de José Martí, en Cuba, Territorio Libre de América, el pueblo, en uso de las potestades inalienables que determinan del efectivo ejercicio de la soberanía expresada en el sufragio directo, universal y público, se ha constituido en asamblea general nacional. También en la colección “Pintores y Guerrillas. El deber de todo revolucionario es hacer la revolución” (Galería Latinoamericana, Casa de las Américas, La Habana, desde ulio 18, 1967) se recogen obras de U. Peña junto con M. Rodríguez, F. Luis, L. Vent Dumois, R. Martínez, C. González, A. Vidal, S. Carratgé y A. Alonso, que ilustran la ideología revolucionaria.
Sin embargo, ya en los años 60 algunas obras de Umberto Peña se salen del discurso oficial aprobado por el gobierno y resaltan el dilema social y el reto que representan las diferentes inclinaciones sexuales. Obras como “No es el momento” de 1967 (Dibujos 67, UNEAC, con dibujos de V. Manuel, S. Cabrera, A. Eiriz y U. Peña, entre otros artistas cubanos) y “No, con el rayo sí” de 1968 combinan una imagenología de representaciones fisiológicas para abordar el dilema de las decisiones a tomar.
No, con el rayo sí. Litografías 1/20, Taller Experimental de Gráfica de La Habana, 1968, 50 x 200 cm. Certificadas por el artista. Cortesía KGJ Colección, Ciudad Real, España.
Ya en los 70 el artista incorpora en su trabajo las imágenes sexuales, como en la “Serie erótica: Ella hundiéndose en sombra y yo tras ella”. Estas piezas fueron censuradas y marcaron el discurso para muchas de sus obras hasta el final de su carrera. Se sigue una guía que sugiere como abordar el reto hasta encontrar la respuesta que mejor se ajusta a tus condiciones[4].
Serie erótica: Ella hundiéndose en sombra y yo tras ella. Litografía sobre papel Guarro 3/7, Taller Experimental de Gráfica de La Habana, 1970, 71 x 50 cm. Sin título. Dibujo sobre papel Guarro, 2013, 100 x 60 cm. Dedicada por el artista, “Para el amigo José en Salamanca su amigo Umberto”. Cortesía KGJ Colección, Ciudad Real, España.
Cuando revisamos sus obras como diseñador gráfico de las portadas de la revista Casa de las Américas y para La Huella Múltiple, nos encontramos con texturas que parecen tejidos textiles que también nos llaman la atención a la representación de la inteligencia y su actividad funcional.
Diseños en la portada de la revista Casa de las Américas. Nos. 102 (1977) y 120 (1980). Firmadas por el artista. La Huella Múltiple. Grabado. La Habana, 1996, Edición 47/300, 25 x 20 cm. Cortesía KGJ Colección, Ciudad Real, España.
La Inteligencia Artificial (IA) y la Inteligencia Natural (IN) son dos tipos diferentes de procesos cognitivos y ambos son primordiales para avanzar en la ciencia y en la educación[5].
La diferencia clave entre la IA y la IN radica en el hecho de que la IA está guiada por algoritmos automatizados por ordenadores, mientras que la IN refleja cómo los humanos y otras especies animales piensan, razonan, perciben y resuelven problemas.
Si bien tanto la IA como los humanos aprendemos observando y analizando las cosas y las acciones que suceden a nuestro alrededor, lo que distingue a la IN es nuestra capacidad de pensar críticamente, tomar decisiones basadas en emociones y experiencias y empatizar o no con los demás.
Esto convierte a la IN en una herramienta mucho más poderosa que la IA, cuando se trata de resolver problemas y tomar decisiones ante dilemas que enfrentamos en la vida, como experimentó Umberto Peña durante su carrera.
La IA y el aprendizaje automático (“machine learning”, ML) están revolucionando las actividades humanas en varios campos, incluidos la educación, la medicina y el estudio de las enfermedades infecciosas, con un rápido y exponencial crecimiento, pero con grandes retos que enfrentar[6].
Por ejemplo, se han empleado o propuesto modelos de IA/ML para comprender mejor las intervenciones destinadas a mejorar el diagnóstico y manejo de enfermedades como la causada por el COVID-19[7]. En el campo de la vacunología cuántica para el desarrollo de vacunas, también se pueden aplicar algoritmos en los que interactúan arte y medicina holística cuantitativa[8].
A pesar de los avances con los modelos de IA/ML, las cuestiones relativas a la dicotomía entre explicabilidad e interpretabilidad aún requieren una atención cuidadosa en estos complejos modelos.
El poder de la IN de Umberto Peña es evidente en su creatividad, inteligencia emocional y capacidad para enfrentar los retos y conectar con los demás en un nivel profundo. Si bien la IA puede generar ideas y soluciones basadas en datos y algoritmos, no puede igualar la creatividad y originalidad de la mente humana. Y si bien puede simular emociones, la IA no puede comprender ni conectarse verdaderamente con los demás, como hizo Umberto Peña con sobra.
La aplicación del flujo de trabajo con la IA implica su uso para automatizar y optimizar tareas repetitivas, y así mejorar la eficiencia y productividad en las operaciones. El flujo de trabajo con la IN, como ilustran las obras de Umberto Peña, nos guían a pensar críticamente para tomar decisiones basadas en emociones y experiencias educadas para enfrentar así los retos de la vida.
Desde mi perspectiva como investigador científico, debemos educar la IA con la IN para seguir avanzando con la posibilidad de enfrentar retos que afectan la salud humana y la sanidad animal.
La combinación de IN e IA puede avanzar con las experiencias de aprendizaje. Tanto la IN como la IA son y seguirán siendo importantes en el aprendizaje y el desarrollo de la ciencia. Mientras la IN aporta creatividad, comprensión emocional y adaptabilidad, la IA es escalable, eficiente y basada en datos.
Al combinar las dos inteligencias, se podrán crear mejores experiencias de aprendizaje, como las que Umberto Peña nos dejó en su exposición “Regreso a un pintor visceral” en la Galería Latinoamericana, Casa de las Américas, La Habana (enero-marzo 2013) y en su felicitación por Navidad junto con Ángeles, enviada a nosotros desde Salamanca el 22 de diciembre de 2020.
Diseño de Umberto Peña. Felices Navidades, 2020. Angeles/Umberto.
© Sobre las imágenes: Todas las obras e imágenes proceden de la KGJ Colección, Ciudad Real, España.
Notas:
[1] Umberto Peña. Museo Nacional de Bellas Artes de Cuba. https://www.bellasartes.co.cu/artistas/umberto-pena
[2] Umberto Peña. Wikipedia. La enciclopedia libre. https://es.wikipedia.org/wiki/Umberto_Peña
[3] Muere Umberto Peña, que rompió con la visión oficial del arte cubano. 14ymedio, 23 de junio 2023.https://www.14ymedio.com/cultura/muere-umberto-pena-oficial-cubano_1_1093691.html
[4] Umberto Peña (y Santiago Armada). Dos impulsos de lo erótico. Museo Nacional de Bellas Artes. Arte Cubano. La Habana, 18 de febrero – 8 de mayo de 2011.
Aguilera, Carlos A. Umberto Peña. Bocas, dientes, cepillos, restos. Zuiderdok, Leiden, The Netherlands, 2020.
[5] Vieth, K. (2024). Navigating Natural vs. Artificial Intelligence in Future Learning. Insyctraining Jul 29, 2024 9:42:55 AM. https://blog.insynctraining.com/natural-artificial-intelligence
[6] Giacobbe, D. R., Zhang, Y., & de la Fuente, J. (2023). Explainable artificial intelligence and machine learning: novel approaches to face infectious diseases challenges. Annals of Medicine, 55(2), 2286336. https://doi.org/10.1080/07853890.2023.2286336
Al Meslamani, A. Z., Sobrino, I., & de la Fuente, J. (2024). Machine learning in infectious diseases: potential applications and limitations. Annals of Medicine, 56(1), 2362869. https://doi.org/10.1080/07853890.2024.2362869
[7] Kamal Shahsavar, S., Alinezhad, A., Keikha, M. (2024). Inteligencia artificial y dudas sobre la vacuna contra la COVID-19. Vacunas, Disponible online el 24 de septiembre de 2024. https://doi.org/10.1016/j.vacun.2024.08.001
[8] de la Fuente J. Quantitative Holistic Medicine Algorithms in Quantum Vaccinomics. Journal of Integrated Health 2024;3(3): 292- 297. https://urfjournals.org/open-access/quantitative-holistic-medicine-algorithms-in-quantum-vaccinomics.pdf
La recepción de Igor Stravinsky en Cuba (1924-1946)
Las aventuras y desventuras de “un raro Quijote eslavo” en La Habana.