El poeta se confiesa hostil a las epopeyas memoriosas. Casi no se autoanaliza, ni le interesa apelar al encanto de otra época, más dichosa que los difíciles años en que escribe y publica estas páginas.
El poeta se confiesa hostil a las epopeyas memoriosas. Casi no se autoanaliza, ni le interesa apelar al encanto de otra época, más dichosa que los difíciles años en que escribe y publica estas páginas.
Hoy nada presagia lo desconocido. Ya no existe la magia del enigma. La ciudad ha olvidado los misterios de la búsqueda.
¿Qué coño quiere Edmundo? Lo mejor sería morir en un orgasmo. El orgasmo es sólo mi desaparición, el olvido sin la muerte. Vivir sin pensar.
39 millones de personas en todo el mundo conviven con este virus. Es una enfermedad que causa alrededor de 630.000 muertes al año.
La obra artística y la influencia de Luis Manuel Otero Alcántara podrán ser vistos una vez más en las calles de Miami Beach con la reactivación de su emblemática performance “Miss Bienal”. El activista y director de Yucabite, Norges Rodríguez estará a cargo de la performace.
La ministra rumana de Cultura, Raluca Turcan, dijo que el país tenía “el deber moral” y la “obligación” de concienciar a las generaciones futuras para que no se repitieran los errores del pasado.
China y Rusia afirmaron que reforzarán su cooperación estratégica durante el encuentro entre el jefe de la diplomacia moscovita y el presidente Xi Jinping.
La agenda de Sánchez incluye reuniones con los primeros ministros de Noruega, Irlanda, Portugal, Eslovenia y Bélgica centradas en la posición de la UE respecto a la guerra entre Israel y Hamás.
“Mi familia emigró, me quedé sola en casa con un montón de evocaciones que no quería abandonar. Sin ánimo de edulcorar mi realidad, traté de involucrar esas instancias de vida también en mis dibujos. Poco a poco fui tomando conciencia del significado de la serie: los dibujos como espacios y diarios de vida”.
El hambre, y las otras hambres, sostendrán el inmovilismo de seis décadas. Con la barriga vacía no se puede pensar bien. Con el alma triste, tampoco. No estoy optimista. No lo estaré hasta que acaben con el embargo. Y eso, coinciden astróloga y bruja, es imposible. A mí quémenme en esta hoguera también. Pero vayan pidiendo el último, que la fila es larga.
Roberto Viña es un artista total: escribe teatro, cuentos, poesía, ensayos. Da clases en la universidad. Por su empeño y dedicación, a veces lo veo ir y venir como si fuera un tipo del Renacimiento. La Habana del siglo XXI parece querer amedrentar, mermar, a todo aquel que, como él, anda con un millón de historias en la cabeza.
Salí de Cuba el 13 de agosto del año 2015. Lo recuerdo como si fuera hoy. Fue duro, pero salía con mis ideas claras: buscar cómo ayudar a mi familia.