Fragmentos del libro El ruido de los libros (Lecturas, voces, caminos) de Luis Felipe Rojas, publicado por Media Mix 305 Ediciones, 2025.

Fragmentos del libro El ruido de los libros (Lecturas, voces, caminos) de Luis Felipe Rojas, publicado por Media Mix 305 Ediciones, 2025.
Pero su expansión global, la resistencia que pueda encontrar o la posibilidad de que inspire una contrarrevolución ya no dependen de él.
La compañía de gas y petróleo lucha por recuperarse de pérdidas récord tras la invasión a gran escala de Ucrania, que destruyó su modelo de negocio.
Sin embargo, sí hay un Castro en quien te reconozco. Te hablo de Sandro Castro, que al igual que tú, ‘my President’, es un malentendido.
En esta ocasión conversamos con Amelia Calzadilla (La Habana, 1991), madre, activista y fundadora de la organización Ciudadanía y Libertad.
Comprobaremos que no habíamos sido más que simples víctimas de una demencial ilusión adscrita, a la fuerza, a lo mesiánico.
Instituto Cervantes de Nueva York: un centro cultural panhispánico, abierto al diálogo, al debate y a los temas contemporáneos.
En ‘Fracturas’, Andrés Castellanos no fotografía Cuba; fotografía su silencio. No retrata un país, sino la caída de su imagen.
En su dimensión política, el rentismo es más conveniente para el régimen. Asegura la desmovilización ciudadana.
Carrión ha vuelto al origen de la novela como discurso caníbal, con hambre de formas nuevas.
En la película ‘Corazón azul’ de Miguel Coyula, el documental ‘Ave Maria’ de Gustavo Pérez, y el libro ‘Everglades’, de Jorge Enrique Lage, se distingue una Cuba que trasciende su historia.
En la pantalla de mi televisor, la pizarra humana parecía respirar, sincronizada o con desfasajes, mucho mejor que cualquier animación actual.
Era un lugar,/ un miedo/ vulgar y colectivo /tejido por las sombras,/por demiurgos / que hicieron una fiesta /y lanzaron al fuego nuestros libros.
“Lourdes Gil fue en un principio una lezamiana convencida, discípula de aquella escuela mitificadora y densa de un barroco cubano”.
En una de sus habitaciones se dio la famosa discusión entre Gómez y Martí sobre un tema que a pesar de los muchos años transcurridos nada ha perdido en urgencia.
Todos los poderes dinásticos contienen y esconden enormes dosis de podredumbre y de voracidad.
Israel interrumpe los servicios del consulado español a los residentes de la Autoridad Palestina, alegando el apoyo al terrorismo y la retórica antiisraelí de los dirigentes españoles.
Washington Examiner: “Mientras que el régimen liberó a los líderes blancos en cuestión de días a condición de que se exiliaran, unos 1000 presos políticos, en su inmensa mayoría negros, siguen en las cárceles cubanas”.
El viceministro de Asuntos Exteriores, Serguéi Ryabkov niega que Rusia pudiera emplazar armas nucleares “bajo el vientre” de Estados Unidos.
La gente ya no conversa: chatea y envía emojis. Todo ello alimenta la ambigüedad idiomática. Actualmente, el debate en torno al color de los emojis es tétrico. Contamos con emojis blancos, negros, amarillos, mestizos, familias hetero y homosexuales. Pero lamentablemente tenemos emojis de perros y gatos de una sola raza. ¡Con tanta variedad que hay!
Los días de San Valentín de hoy, no son los mismos de antes, en La Habana del asombro, en La Habana-regazo.
Cuban diplomacy is elaborated in a covert manner, and thus lacks transparency. Since 1959 the doctrine of simulation as a combat weapon has prevailed.
Es una vergüenza que la ONU ayude a sostener la ficción de que los cubanos pasan hambre y huyen del país por culpa del imperialismo estadounidense.
“La vida en Cuba es muy chata. Aunque, ojo, tan chata como puede ser la de una familia cubana en Miami, solo que por razones diferentes. En la isla hace décadas que se impuso la grisura, hace rato que se acabó el relato. Lo que prevalece a nivel político, social e incluso doméstico, es una ausencia total de imaginación”.
Entrevista a Miguel Sales, presidente de la Unión Liberal Cubana y vicepresidente de la Internacional Liberal, a propósito de la publicación de Poscastrismo (Hypermedia, 2017).
La obra cinematográfica de Miñuca Villaverde es uno de los momentos “altos” de un cine que no se prodiga exactamente en altitud.
En la obra de Ivonne Ferrer, las cabezas y los corazones son dos símbolos iconográficos fundamentales. Cabezas que se multiplican o clonan como una legión de personalidades o pensamientos mutantes, imposibles de atrapar desde una primera mirada.
Un discurso propio emanado del relevo generacional, la marginalidad, y una ética signada por el machismo, la violencia y el sexo.
Si alguna verdad transmiten las fotografías tomadas por Eldy Ortiz es la de imaginar lo insoportable: la verdad de la espera por el dato del terror.