La censura contra los cineastas cubanos no es solamente una vulneración de los derechos de estos creadores, sino una restricción contra la producción, conservación y evocación de la memoria colectiva de la nación cubana.

La censura contra los cineastas cubanos no es solamente una vulneración de los derechos de estos creadores, sino una restricción contra la producción, conservación y evocación de la memoria colectiva de la nación cubana.
¿Quién necesita una Patria? Patria = Cárcel. Cárcel = Traición. Traición = Muerte.
Sandra Ramos (La Habana, 1969) es artista visual, curadora y profesora. Su obra explora una amplia variedad temática que incluye la nacionalidad, la identidad, las migraciones y el género. De su trabajo curatorial destaca ‘La huella múltiple’, en el año 2003.
¿Por qué los periodistas jóvenes son capaces de trabajar para los medios estatales incluso cuando los perciben como personal y profesionalmente opresivos?
El ODC conmina a organismos internacionales a revisitar los acuerdos ratificados por Cuba en materia de Derechos Culturales.
Los líderes de la UE no aprueban un paquete de ayuda crucial de 50 000 millones de euros, obstaculizado por el veto del primer ministro húngaro, Viktor Orban.
Mientras Occidente duda sobre el apoyo a Ucrania, Putin promete continuar la guerra, citando la resistencia económica de Rusia y sus objetivos inalterados.
Los republicanos autorizan la apertura de un procedimiento de impeachment contra el presidente, por presunto abuso de poder vinculado a los negocios de su hijo Hunter.
Basta ya de seguir creyendo en la Utopía. ¿Qué clase de martirio inútil es ese?
Yo llevaba meses fumando mucho. Prendía un cigarro antes de levantarme, otro con el café, otro después de cepillarme los dientes y otro al vestirme, y así, a cualquier hora. Me escondía para bajarme el nasobuco y fumar en la calle sin que me viera la policía. A veces, en las colas, fumaba con el nasobuco puesto.
Si La Yuma fuera exclusivamente Miami, podríamos definirla de dos maneras muy complementarias, además de todas las conocidas: el extraño caso de las toallas fake, y la aplicación telefónica para reproducir el sonido de un ventilador.
El equívoco es parte de nuestra naturaleza insular. Y además el ridículo, que nos salva de ser invisibles. Y cuando pensamos en esas ventajas, tan útiles para el arte y la política, llegamos a otra palabra querible y exacta: la desilusión. La desilusión del Almirante, la primera desilusión. Y faltaban muchas otras por venir.
Ernesto Leal: una obra densa, una rareza, una lucidez dolorosa, una ironía feroz, una constancia pasmosa, un rigor absoluto, una inteligencia aguda, una cultura amplia, una espiritualidad intensa, una especie de camino de perfección individual que le otorga a su taller, un aura enigmática.