Estuvimos durante tres meses rodando en el Riomar. Durante ese tiempo cambió la administración del edificio. Entrar se volvió más difícil.
Cine
El camino a ‘Vicenta B’ (III): Fluidos corporales
Ser un director de cine también es eso: saber hasta dónde tu cuerpo puede llegar.
‘Corazón azul’ en el cementerio de La Habana
Cuando Carlos Quintela vio a Héctor Noas en la película, dijo que era como un Bruce Willis cubano. Miguel necesitaba a alguien con su fenotipo.
El camino a ‘Vicenta B’ (II)
Una cosa era que la película se parara por “fuerza mayor”, por algo gubernamental, y otra cosa era que se detuviera porque el director tenía sarna.
Hollywood y La Habana: umbrales imposibles
Ana de Armas y Ben Affleck habían cancelado nuevamente su presencia. Esta vez de forma definitiva. Explicaron que querían ver la película, pero no en nuestra casa, porque no querían problemas.
El camino a ‘Vicenta B’
Ha muerto una persona en una de mis películas, no lo puedo creer. Su rostro estará conmigo mañana en el rodaje, y en la edición, y en la película por siempre.
10 películas con escenas de sexo real
Las películas que buscan naturalizar los intercambios sexuales explícitos entre actores son poco difundidas, relegadas a circuitos especiales, encasilladas en nichos de culto o experimentales, o simplemente prohibidas. Como sucede con varias de las cintas recogidas en la lista que ofrezco a continuación.
Los masturbadores de las playas desiertas
Miguel seguía encuadrando a unos cien metros de mí. Empecé a escuchar unos gemidos a mis espaldas. Me volteé. Tras las uvas caletas, había un hombre tirado en el suelo, con los pantalones bajados, masturbándose… Pero Miguel había decidido terminar la escena a toda costa. Su cine es más importante que la propia vida.
Otro obituario. Colección automatizada
Muerte química
Detenido. / Mirando en otra dirección. / Ausente. / La luz pega en la espalda y el rostro ha quedado en la sombra. / Sin respirar. / Ya sin moverse. / El lente de la cámara le congela la sangre.
Contemplar el horror (sin contemplaciones)
No te preocupes, lector, que yo no te podría contar ‘DAU. Degeneration’ aunque quisiera. La exposición in extenso del universo totalitario que es ‘DAU’ no admite el encapsulamiento en una sinopsis. Y después, lectora, está también el problema de los mimos, los que ‘DAU’ nos prodiga a los supervivientes.