Hace dos días que voy y vengo entre espacios virtuales: el Facebook personal de David Mateo; Hypermedia Magazine, revista que sigo con mucho interés; y El Sr. Corchea, blog de Elvia Rosa Castro. Al final salgo convencida del auténtico gesto de Henry Eric Hernández. Y con respecto a Art Crónica, creo que cuando el río suena…
Arte
Aislamientos y encierro: temas recurrentes del cine cubano
Recluidos en la Isla y desesperados en busca de un escape, emergen los protagonistas de Nada (Juan Carlos Cremata, 2001), Personal Belongings (Alejandro Brugués, 2007) y Santa y Andrés (Carlos Lechuga, 2016). Pero hablando de inmovilidad y clausura, el cambio se compulsa hacia adentro en Lista de espera (Juan Carlos Tabío, 2000).
La estafa crítica de Art Crónica
Creada sobre bases de independencia económica y autonomía de pensamiento, parecía que Art Crónica iba establecer un entorno plural para repensar la historia del arte cubano. Varios colegas pensamos que Art Crónica sustituiría el controlado ámbito discursivo de la revista Arte Cubano por uno más inclusivo, o al menos, no tan reprobatorio.
¡Feliz fin del mundo!
100 Dinge, de Florian David Fitz, narra un mundo consciente de que no podrá mantenerse como está durante mucho más tiempo. Comparte con la cinta Parásitos una suerte de enfoque profético sobre la necesidad de pasar página en la historia. Cuando las cosas se ven tan claramente es porque están a punto de irse. Así ha sucedido.
Bacurau, tierra en trance
Entrada la noche es la hora del bacurau, una más entre las presencias fantasmales del desierto brasileño. El bacurau se muestra solo cuando quiere, como un arañazo apenas perceptible que atraviesa el crepúsculo. Este pájaro inasible está en peligro de extinción, al igual que la cultura brasileña.
Rocío García se empeña en el amor
Rocío García visitó la noche del malecón habanero, en el que se dan cita gran parte de los personajes que recrea. Estar ahí le permitió llenar de anécdotas sus pinturas. Pero su interés no se centra en la crónica, ni en el valor de memoria que representa simbolizar personajes, sino en brindar anécdotas enmascaradas a través de los acontecimientos mismos.
Cuquita: una muñeca cubana en Nueva York
“Hola, mi nombre es Cuquita, the Cuban Doll. Nací en La Habana y ahora vivo en Nueva York. Me identifico como mujer. Me encuentro rodeada de espinas. Además, menstrúo cada mes. Meditaré mi salida del capitalismo y el comunismo por 30 minutos. Únete si quieres. Por favor no me toques”.
Gustavo Acosta: una epifanía del silencio
Gustavo Acosta dibuja y pinta el futuro que se hunde en el pasado, el derramamiento del sueño en la vida real, los recuerdos fraguados por la erosión del olvido. No tiende al espectador anhelante el cebo de una significación, de una demostración, sino una sugerencia para que su visión se abra, desborde su época y resuene su espacio mental.
Arte cubanoamericano en Miami: Let’s Do Nada!
Adalberto Delgado: “Do you believe this?! We should do something”. Fred Snitzer: “Let’s do nada”. Y así, un poco a lo Tzara, con el mismo nihilismo pero en espanglish, en la humedad sofocante del pantano y entre sorbos de vino, en el verano de 1983, nació Nada.
Pablo Manuel Rojas: la soledad de la memoria (o viceversa)
La obra de Pablo Manuel Rojas, joven realizador cubano-español, está transida por ese sentimiento de soledad en el desarraigo, en la violencia que el espacio de allá ejerce sobre el cuerpo y la mente del sujeto de aquí (o viceversa); en la pulsión infinita del recuerdo y el anhelo, que moldean la memoria afectiva y sus múltiples expresiones.