Etiqueta: José Lezama Lima

Antonia Eiriz o el reflejo de no bajar la cabeza - Julio Llópiz-Casal

Antonia Eiriz o el reflejo de no bajar la cabeza

Mi vicio es hacer lecturas simbólicas de las imágenes y sus coincidencias. A pocos metros de donde estaba parado, se encontraba uno de los mosaicos de la Rampa, en el deplorable estado en que están casi todos hoy. Antonia Eiriz a unos metros de un Ditú y a una cruzada de calle del Pabellón Cuba: casi se me dilatan las pupilas al pensar esto

9550 - Abel Arcos

9550

¿Quién coño es Lezama Lima comparado con el Che Guevara? ¿Quién es Lezama Lima, y cuántos viejitos cubano podrían morir mañana sin haberlo leído?

Desorejados - Manuel Pereira

Desorejados

En Un perro andaluz vemos una mano llena de hormigas: obsesión onírica de Salvador Dalí que se repite en los relojes blandos de La persistencia de la memoria, donde los insectos devoran la carne del tiempo. David Lynch rinde homenaje a Buñuel y a Dalí con la oreja cortada, plagada de hormigas, que descubrimos en Terciopelo azul.

Artaud en La Habana - Rolando Sánchez Mejías

Artaud en La Habana

Artaud en La Habana. Textos inéditos y olvidados, el libro de Pedro Marqués de Armas publicado por la editorial Casa Vacía, puede ser leído como una investigación policial. La verdadera ficción, al tratar con fantasmas, es metafísicamente detectivesca. Y lo novelable y el ensayo trabajan con los agujeros, con lo que no sabemos ni podremos saber.

Chaturbation: sexo en sí y para sí - Alberto Garrandés

Chaturbation: sexo en sí y para sí

Estar o no estar sol@. Tener o no tener suficientes megas. Esa es la cuestión. El “recelo social” será una de las consecuencias más terribles del macrorrelato pandémico, cuando la COVID-19 ya no sea una amenaza global sino individual. En términos generales, será mejor acudir a la masturbación que al sexo informal.

No molesten - Amanda Rosa Pérez Morales

No molesten

Les voy a decir lo que pienso: la gente se cree que con esto del confinamiento vamos a alcanzar la paz interior. La gente se cree que, a pesar de la precariedad económica que se avecina, una parte de nosotros se va reconstruir, va a entender el sentido de la soledad y nos reconciliaremos con espacios que antes significaban solamente descanso y enajenación.