Cambios en el ICAIC provocan críticas y preocupaciones: La comunidad cinematográfica pide mayor transparencia y participación

Cambio de liderazgo abrupto causa preocupación

El Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficos (ICAIC) ha estado en el centro de una tormenta de críticas después de los recientes cambios en su liderazgo. Ramón Samada Suárez, quien ha estado al frente del ICAIC como presidente, ha dejado su cargo. En su lugar, Susana Molina, anteriormente Directora de la Escuela Internacional de Cine y Televisión (EICTV), ha sido designada para asumir la presidencia interina.


La falta de transparencia en la toma de decisiones despierta la ira

La cineasta Rosa María Rodríguez lamentó la falta de participación de los cineastas en esta decisión clave, sugiriendo que los cambios podrían desatar una fractura más amplia entre los cineastas de todo el mundo y la EICTV. Rodríguez argumentó que el ministerio de cultura había actuado de manera unilateral, destacando que esta podría ser una señal alarmante para el futuro de la EICTV.


Descontento con los nuevos nombramientos

El nombramiento de Waldo Ramírez de la Ribera como director de la EICTV ha sido objeto de críticas por parte de miembros notables de la comunidad cinematográfica. Ricardo Figueredo Oliva, miembro de la EICTV, cuestionó la aptitud de Ramírez para el cargo, argumentando que la calidad de su trabajo previo en televisión deja mucho que desear. Por su parte, Juan Carlos Sáenz de Calahorra expresó su preocupación por la forma en que se manejó la transición de liderazgo, calificándola de “abrupta, arbitraria y silenciosa”.


Miedos de intervención política y la demanda de autodeterminación cinematográfica

Otros miembros de la comunidad cinematográfica han expresado temores de una creciente intervención política en la EICTV y el ICAIC. Abigail García Fayat lamentó lo que percibe como una influencia cada vez mayor del Partido Comunista de Cuba (PCC) en estas instituciones. Antonio Enrique González Rojas hizo un llamado enfático para que el cine cubano y la EICTV sean preservados “para los cineastas”.


Análisis más matizado de la situación

La profesora Alina Bárbara López Hernández ofreció un análisis más matizado de los recientes cambios en el ICAIC. Ella propuso que el cambio podría ser un intento de los detentadores del poder de mantener la apariencia de cambio sin alterar realmente la estructura de poder existente. Sin embargo, también elogió el proceso democrático seguido por la Asamblea de cineastas, sugiriendo que este podría ser un modelo para futuras decisiones.


El camino a seguir

Estos cambios de liderazgo y la respuesta generalizada a ellos ponen de manifiesto la necesidad de un mayor diálogo y transparencia en el proceso de toma de decisiones. El futuro de la EICTV y el cine cubano depende en gran medida de cómo se manejen estas preocupaciones, y la comunidad cinematográfica estará observando de cerca cómo se desarrollan los acontecimientos.


© Imagen de portada: Ramón Samada Suárez en el programa televisivo ‘Mesa redonda’.




entre-economistas-pedro-monreal-responde-juan-triana-cordovi

Entre economistas: Pedro Monreal responde a Juan Triana Cordoví

José Ernesto Hernández

El economista Pedro Monreal desafía algunas de las ideas que circulan en la sociedad cubana en cuanto a los activos nacionales y el poder.






Print Friendly, PDF & Email
1 Comentario
  1. Realmente lamentable todo lo que sucede con la EICTV y el ICAIC, instituciones tan importante en la historia del cine cubano y latinoamericano. Las decisiones arbitrarias en el arte plantean un desafío intrigante para nuestra comprensión y apreciación de las obras creativas. En muchos casos, el arte se percibe como una expresión libre y personal del artista, que busca transmitir emociones, ideas o perspectivas únicas. Sin embargo, cuando las decisiones parecen tomarse al azar o sin una justificación aparente, surgen preguntas sobre la intención detrás de ellas y el significado subyacente.

    Las decisiones arbitrarias en el arte pueden generar reacciones diversas. Algunas personas las encuentran estimulantes y emocionantes, ya que desafían las convenciones establecidas y fomentan la exploración de nuevas posibilidades. Estas decisiones pueden llevar a descubrimientos inesperados y estimular la imaginación tanto del artista como del espectador.

    Por otro lado, algunos pueden ver las decisiones arbitrarias como meros actos de capricho o falta de habilidad. Pueden considerar que estas elecciones carecen de coherencia o intención, lo que dificulta la comprensión o conexión con la obra. La falta de una estructura o base sólida puede generar confusión y cuestionamiento. Sin embargo, vale la pena considerar que la aparente arbitrariedad puede tener un propósito más profundo. En ocasiones, los artistas pueden emplear decisiones arbitrarias como una estrategia para liberarse de las limitaciones preconcebidas, permitiendo así una exploración más genuina de su creatividad. Estas elecciones pueden romper con las convenciones tradicionales y desafiar las expectativas, abriendo espacio para nuevas interpretaciones y significados.

    La belleza del arte radica en su diversidad y capacidad de generar diálogos e interpretaciones múltiples. Si bien las decisiones arbitrarias pueden plantear desafíos para nuestra comprensión, también nos invitan a reflexionar sobre nuestras propias percepciones y limitaciones. Nos instigan a explorar nuevas perspectivas y apreciar las diversas formas en que la creatividad puede manifestarse.

    En última instancia, las decisiones arbitrarias en el arte nos desafían a superar nuestras preferencias preestablecidas y estar abiertos a nuevas experiencias. Nos recuerdan que la interpretación y el significado del arte son subjetivos y evolutivos. Al cuestionar lo familiar y lo establecido, podemos descubrir nuevas formas de expresión y encontrar un mayor aprecio por la complejidad y la diversidad del arte en todas sus manifestaciones.
    El cine, dijo André Bazin, sustituye nuestra mirada por un mundo más en armonía con nuestros deseos. En tal sentido habrá que luchar porque siga existiendo un cine cubano con una mirada única. E instituciones transparentes que la respalden.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada.