Una imagen nunca ha sido una fuente honrada para expresar la felicidad.
A Bob Dylan, de una perfecta desconocida
Esa chica sería yo en los sesenta, una piedra rasposa y contestataria. Lástima que nací en el lugar equivocado.
El mal en Patricia Highsmith
A cualquiera, seguramente, le ha pasado por la cabeza perpetrar un asesinato. A mí misma me pasó.
Lo inapresable del verdadero goce (crónica gay)
Hombres con sus cuerpos flotando sobre balsas. O expuestos al sol, con el trasero al aire, en duchas.
Enero, bello y terrible
La noticia me sorprende. “Se fue. Aún no sabemos si pudo llegar a la frontera”.
La Navidad robada
Para qué medir la felicidad, si la infelicidad y el desatino son el gran nudo, la perfecta armonía de este país.
Sylvia Plath, una oveja en la niebla
Sylvia Plath sería como una especie de ‘femme fatale’ de la literatura, marcada por la enfermedad y la muerte.
Basura que la noche anterior fue una cena exquisita
“El opio es el mejor desayuno para no sentir el impulso de llorar por la luz que no ha llegado”.
Francesca Woodman en apagón
La joven, fotógrafa gótica y surrealista, posaba con su cuerpo desnudo, envuelto en transparencias, ante el ojo de la cámara.
Cama y mesa
No pudo ser mejor. Él era mi Humbert Humbert. Y yo, su Lolita. Treinta y tres años contra catorce.