Como en 1958, este 2023 los cubanos nos enfrentamos a un año nuevo distinto. En la mayoría de los hogares de la Isla, flota una tristeza y una desesperanza que no se vivió ni en los peores momentos de los 90.

Como en 1958, este 2023 los cubanos nos enfrentamos a un año nuevo distinto. En la mayoría de los hogares de la Isla, flota una tristeza y una desesperanza que no se vivió ni en los peores momentos de los 90.
Este dosier podría llamarse: “Los poetas cubanos recomiendan”. Pero entonces sería traicionera con el tiempo perfecto de la poesía.
La vulva ha sido venerada como símbolo de abertura hacia realidades escondidas y, al mismo tiempo, túnel por el que llegamos a la luz del mundo.
La presencia de China en Nicaragua crece con proyectos militares, de infraestructuras y mercados, lo que introduce un cambio en la correlación de fuerzas en el área.
María A. Cabrera Arús (La Habana, Cuba, 1973) es socióloga. Estudia y escribe sobre los significados políticos de la moda y la cultura material, y enseña en la Universidad de Nueva York. Gestiona y dirige el archivo y colección Cuba Material.
Estados Unidos se enfrenta a críticas tras canjear al corrupto venezolano Alex Saab por estadounidenses detenidos, lo que suscita dudas por motivos diplomáticos y éticos.
Tiroteo mortal en el centro comercial Paddock, de Ocala, deja un muerto y un herido. El autor —un hombre enmascarado— huyó del lugar.
Los ataques israelíes matan a más de 90 palestinos; Biden mantiene conversaciones, pero evita presionar para un alto el fuego.
“Ernesto G. es el ‘flâneur’ que anota un registro vivencial. En el trasiego de los seres variopintos de una misma talla sociocultural, halla sus historias”.
El cubo de Rubik se resuelve mediante una combinación de conmutadores matemáticos. Uno de ellos es el SexyMove. Intentaré aplicar el SexyMove a algunos sucesos que me están dando vueltas en la cabeza desde que comenzó la actual crisis de la COVID-19.
Lynn Cruz y Miguel Coyula se retratan el uno al otro, y cada quien escribe sobre qué hace para sobrevivir a la amenaza del Coronavirus y a la censura que el gobierno cubano ha impuesto sobre ellos.
Chapapote en las manos, en el pelo, en la ropa, en el balcón, en mi cama. Mi sangre es de chapapote, marcada. Renegada por el sistema y por la todopoderosa comunidad artística. Antes de la cuarentena ya me habían confinado, me habían condenado a hacer arte sola.
Hoy en día, gracias a las redes informáticas, pudiera haber un debate y referéndum permanentes sobre todas las cuestiones importantes. Pero a muy poca gente le interesa eso. A la gente les interesa que los especialistas en bienestar público les garanticen el bienestar personal. Para que haya democracia tiene que haber demócratas, y eso es lo que no hay.