Este dibujo de Pablo Rosendo es un himno de paz, de bondad. El artista nos dice que hasta los extremos que parecieran más irreconciliables pueden negociar bajo la égida del amor.
Este dibujo de Pablo Rosendo es un himno de paz, de bondad. El artista nos dice que hasta los extremos que parecieran más irreconciliables pueden negociar bajo la égida del amor.
¿Cómo es posible que ‘El caso Padilla’ ande por festivales de cine y sus protagonistas no estén hablando de la sensación que produce verse tanto tiempo después?
Al interior de las celdas continúan ocurriendo sucesos criminales a los que nadie presta atención: la necesidad sexual habrá de ser satisfecha contra todo precepto.
El INM de México rescató a 156 migrantes de 8 países, hacinados en un camión y un remolque, en un esfuerzo coordinado con la Sedena y la Guardia Nacional.
El presidente Javier Milei se reúne con el Papa Francisco, con el objetivo de sanar las desavenencias del pasado, en lo que podría leerse como un gesto por la concordia nacional.
Las elecciones de 2024 suscitan un debate sobre la edad presidencial, ya que los candidatos serán los más viejos de la historia, lo que provoca dudas sobre su idoneidad para el cargo.
A dos años y medio de las protestas masivas del 11 de julio, cientos de cubanos inocentes guardan prisión en Cuba, entre ellos quince artistas.
Los cárteles mexicanos se infiltran en Montana, explotando el aislamiento de las comunidades indígenas, traficando con metanfetamina y fentanilo.
Las acciones encubiertas de Irán suponen una amenaza. La influencia que ha logrado en la región, “puede terminar en una bomba nuclear en América Latina”.
Que me alcancen en mi pesadilla simboliza que correr es por gusto, que hay cuarentena y no voy a salir hasta que todo esto pase. “El sueño es una realización de deseos”, dice La interpretación de los sueños. Freud se pone de pinga. Voy a hacerme dos panes con aceite y a oír Popy & La Moda. Que son dos formas de salir corriendo.
“La gente de la Generación Cero le dio la vuelta a los temas realistas: se habían explotado tanto que, para ellos, ya era más atractivo imaginar un futuro distópico. Cualquier cosa que no fuera la realidad. Como yo misma hago a veces”.
La televisión dando el parte diario de nuevos contagios. La gente buscando comida en colas cada vez más largas. Mi esposa averiguando dónde hay pollo para el niño. La angustia de saber que, por un buen tiempo, no veré a mi hija que vive en México. La incertidumbre de si me alcanzarán este mes los datos móviles para hablar con ella.
De cara a lo que vivimos, lo que más sentido tiene para los artistas es defender una actitud. Está por verse aún cuán herido o cuán sabio se va a levantar el mundo de este embate. Las maneras de producir objetos artísticos, las maneras de ser un artista, van a cambiar y no sabemos cómo ni cuánto.