Sexos lamidos: falo expuesto a la boca glotona, vagina expuesta a la boca de grandes labios.

Sexos lamidos: falo expuesto a la boca glotona, vagina expuesta a la boca de grandes labios.
‘Revolución cosechera’ es una entrega de la serie ‘Cosa seria’, una columna de opinión del artista Omar Santana, en ‘Hypermedia Magazine’.
Las élites totalitarias cubanas también deberían leer a Havel; aunque dudo que lo hagan.
La candidata opositora venezolana, que una vez confrontó a Hugo Chávez, surge como una figura prometedora para las elecciones de 2024.
Imposible no llegar a las lágrimas al pensar que esa sonrisa franca de trompeta de carnaval no estará esperándonos tras la puerta de su apartamento oloroso a puerco y pollo al horno.
Los líderes mundiales, encabezados por el presidente francés Macron, se manifiestan en apoyo a Israel, al tiempo que subrayan la necesidad urgente de proteger a los civiles.
Los cruces de la frontera sur de Estados Unidos alcanzan máximos históricos. Las entradas legales se disparan, mientras los cruces ilegales no experimentan un aumento significativo.
Obama señaló: “Ya han muerto miles de palestinos en los bombardeos de Gaza, muchos de ellos niños. Cientos de miles han sido desplazados de sus hogares”.
El éxodo como escaramuza fútil de una mente atormentada contra sí misma. Como un placebo triste, un autoengaño.
Ser un cineasta político o escandaloso no es ninguna vergüenza para un intelectual. Pero sería tonto considerar que ‘Santa y Andrés’ pudiera avanzar por el mundo sin el manto gris de la censura, que asusta y a la vez te muestra quienes son tus amigos en las malas, en lugar de esos cómplices puntuales que están ahí cuando las cosas marchan.
En cualquier caso, la noche que no fui a verla ya estaba casada. Parecía vivir en varios lugares al mismo tiempo: Toronto, Dubái, Libia, de nuevo Toronto. En esa época todavía me llegaban correos suyos o veía en Facebook sus fotos con niqab. Era traductora: de algo le habían servido todos aquellos tumbos.
Si los campos nazis son el Mal absoluto, el gulag se parece mucho más a una pesadilla kafkiana.