¿Por qué los periodistas jóvenes son capaces de trabajar para los medios estatales incluso cuando los perciben como personal y profesionalmente opresivos?

¿Por qué los periodistas jóvenes son capaces de trabajar para los medios estatales incluso cuando los perciben como personal y profesionalmente opresivos?
“Era rechazo. Tiene que ver con esas máscaras que nos ponemos. No decimos las cosas como son. Hay palabras que tenemos dentro y que no tenemos el valor de decir”.
Al borde de lo aceptable: óvulo borrascoso y desmenuzado, proteínas y orgasmo; y uno ahí, tan vampírico, tan satisfecho y campante, tan orgullosamente ‘manchado’.
La película desentraña una confrontación encubierta que desemboca en una escalofriante secuencia de homicidios.
Morir de amor, y ‘morir contra el desamor’ (en una metáfora muy abarcadora) acaso sean formas escandalosamente lúcidas de protestar.
Basta ya de seguir creyendo en la Utopía. ¿Qué clase de martirio inútil es ese?
La guerra entre Israel y Hamás se intensifica con mortíferos combates urbanos; el número de muertos en Gaza supera los 18 600.
El “milagro” de Guyana encandila al ineficaz régimen venezolano.
Brasil envía a su hombre fuerte para las relaciones internaciones, con el objetivo de resolver la escalada entre Venezuela y Guyana. Al mismo tiempo, acantona el ejército en la frontera.
El coqueteo como forma de subversión, es también una forma de emancipación de un dominio, en este caso totalitario. El arte cubano y su crítica ha hecho del coqueteo un espacio de comunicación, comunión simbólica, conceptual y textualsubcultura con autonomía y representación, que muchas veces se traduce en activismo.
Tati, no te mates. Tati, que la traición no te mate. Tati, una noche, después de los Chevy Opala, si después de los Chevy Opala quedan noches, te tomaré en mis brazos y te haré el amor. Tati, hasta la derrota siempre, compañera.
Francisco Barreiro es uno de esos actores que siempre te sorprenden para bien. Como un experimentado equilibrista, pasito a pasito, se ha hecho una carrera llena de títulos sorprendentes. Sin ninguna pisada en falso. Películas certeras, que además de entretenernos y hacernos volar la mente, nos dan una esperanza.
¿Qué haría mi abuelo hoy ante la prepotencia y el abuso policial tan frecuentes, ante los cubanos apresados, torturados o asesinados en estos 60 años? ¿Le parecería muy lejano? ¿Se sentiría tan impotente y desamparado… como yo? La rebeldía ha muerto, la mataron.