2 de septiembre de 2023. Tal día como hoy, hace quince años, Google lanzó al mundo Chrome, su navegador web patentado, poniendo en marcha una serie de acontecimientos que alterarían para siempre el panorama de la navegación por Internet.
En 2008, cuando Google, una empresa sinónimo de búsqueda en Internet, presentó su propio navegador, el sector se llenó de preguntas. Muchos se preguntaban por qué Google entraba en un espacio ya ocupado por gigantes como Internet Explorer de Microsoft. En retrospectiva, quizá la pregunta más adecuada debería haber sido: ¿Por qué Google no había entrado antes en el sector de los navegadores? Dado que los navegadores eran la puerta de entrada al vasto conjunto de servicios de Google, parecía una progresión lógica.
Las fuentes revelan que la idea de un navegador propio de Google llevaba tiempo gestándose, pero su director ejecutivo, Eric Schmidt, dudó al considerar que la empresa no estaba preparada para sumergirse en la tumultuosa «guerra de los navegadores». Pero en 2008, con unos ingresos anuales de miles de millones de dólares, Google estaba listo para desafiar el dominio de Microsoft en el mercado de los navegadores.
Fue un movimiento audaz, pero la trayectoria de Chrome tras su lanzamiento superó todas las expectativas. Un año después de su lanzamiento, Chrome ya estaba a la par con Safari de Apple. A finales de 2011, superó a Firefox y, poco después, logró lo inimaginable: destronar a Internet Explorer de Microsoft, que había sido una fuerza inquebrantable en el mercado de los navegadores durante años.
Curiosamente, el meteórico ascenso de Chrome pareció estar en correlación directa con el declive de Internet Explorer. En el lapso de unos pocos años, de 2008 a 2013, la cuota de mercado mundial de Internet Explorer se desplomó del 68% a un mero 25%. En la actualidad, su sucesor, Microsoft Edge, solo cuenta con un 5% de usuarios en todo el mundo.
De aquí a 2023, Chrome cuenta con una cuota de mercado superior al 60%, eclipsando a su rival más cercano, Safari, que en agosto de este año contaba con una cuota del 20%.
La historia de Chrome es una historia de estrategia, innovación y aprovechamiento del momento. Ahora que celebra su 15º aniversario, el navegador sigue siendo un testimonio de lo rápido que puede cambiar la suerte en un panorama tecnológico en constante evolución.
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