Greenaway relee a Shakespeare y coloca, en cada página, miles de notas al pie que hacen de ‘The Tempest’ una historia con diversos tipos de legibilidad: la teatral, la fantástica, la histórica, la antropológica, la estilística, la visual, la onírica, la sexual y la operática.
Un jabón, unos pelos, un enano singón y una camisa Calvin Klein
Riverón es uno de los poquísimos narradores cubanos que hace lo que quiere con esas difíciles acotaciones de los diálogos, tras la cuales —ya lo he dicho: la mayor parte de las veces se trata de un ‘asunto de oído’— una página puede elevarse a la categoría de irrepetible.
Visualidad gótica: Cuba y la carne
Hablar, en Cuba, de la carne, es viajar a tres regiones conexas y aposentarse en ellas simultáneamente: la carne sexualizada, la carne trucidada (asesinatos, feminicidios en su inmensa mayoría) y la carne comestible, que deviene cada vez más un manjar incorpóreo.
Enzzo Hernández: rituales, cuerpo, escritura
No se me ocurrió otra cosa, invadido por el estupor y la idea de la consagración a lo luminoso, que pedirle a Enzzo que posara para mí mientras yo, despertando al pintor que ya había sido, pintaba su cuerpo con símbolos egipcíacos, escribía fragmentos de mi libro en su piel.
Ezequiel Vieta cumple 100 años
No ser un escritor “de la Revolución” lo ponía a uno en situación de “escritor no confiable” y dentro de una parcela como mínimo muy extraña.
Francis Bacon vive aquí (50 años de ‘Último tango en París’)
El tiene 45 años y ella 20. Y que nadie se equivoque: al final eso sí importa.
Calvert Casey: regresos
Un escritor discreto es, por lo general, un escritor intenso. La intensidad de Casey es una marca asociable a la infelicidad que roe por dentro y come.
Ficción de la libertad, libertad de la ficción
Vivimos dentro de la cultura del control y, en concreto, en un país descontrolado, azaroso, incierto, balanceándose en derivas político-financieras.
Yo es otro: inicio de año
Hay una violencia monstruosa y metastásica, y de momento uno quiere ser otro. Salirse. Escapar.
‘Ulises’ y Molly Bloom: la lengua de Odiseo
‘Ulises’, como ya se ha dicho, es el laberinto de una ciudad, una mente y un corazón. El laberinto de una persona que ama. Y es, además, Molly Bloom: la mujer que dice, al final de la obra: “sí quiero sí”.