Ser escritor en Cuba, hoy, es ―¡cómo no!― un tremendo ejercicio de terquedad. De orinar contra el viento. De dar cabezazos contra el muro.

Ser escritor en Cuba, hoy, es ―¡cómo no!― un tremendo ejercicio de terquedad. De orinar contra el viento. De dar cabezazos contra el muro.
Un teatro de la comprensión y dignificación del mundo femenino y del cuerpo como espacio sometido que se convierte en un grito en escena.
Nadie escuchaba. Nadie escucha aún. Lamentablemente hoy, por lo teatral en el discurso, todos hablan, o publican, o cantan, o pronuncian.
EE.UU. advierte de sanciones en respuesta a la inhabilitación de los líderes opositores María Corina Machado y Henrique Capriles para participar en las elecciones de 2024.
Ana Olema (Holguín, Cuba, 1986) es, artista visual, influencer y activista por los derechos humanos y la democracia de Cuba. Junto a Liu Santiesteban conduce ‘Juntas y Revueltas’, programa de YouTube que denuncia al régimen cubano y aboga por la libertad de los presos políticos.
Partiendo de Tapachula, el grupo ha recorrido casi 40 kilómetros hasta Huixtla, con planes de dirigirse a Escuintla tras una noche de descanso.
El experto militar Oleg Zhdanov afirma que la muerte de Putin no cambiará Rusia, advirtiendo de una transición más dura y de la continuación de la agresión a Ucrania.
Los datos que se esperan del análisis están destinados a probar la teoría que sugiere que los asteroides trajeron los primeros fragmentos de vida a la Tierra.
¿Te vas? ¿Otra vez te vas? ¿Y hasta cuándo? —ella interroga, pero el hombre la mira y no responde. La mira y no la besa…
“Me acerco al espacio de diferentes maneras. No suelo explicar lógicamente estas relaciones en mi proceso de trabajo, tiendo más a argumentos que podrían entenderse como feeling.”
La fotógrafa Evelyn Sosa retrata a la periodista Mónica Baró, como parte de la entrevista “Mi verdadera libertad proviene de crear”.
“Cuando me integré a Areíto yo todavía le daba el beneficio de la duda a la Revolución Cubana. El problema fue cuando empezaron a reprimir a la gente. He comenzado a releer los números de Areíto que nosotros publicamos en 1980, con todo lo del Mariel, por ejemplo, y no puedo creer la carga ideológica que tenía y que yo no veía entonces”.
“La credibilidad es el patrimonio más importante de un periodista, cuesta muchos años crearla y se puede perder muy rápido.