Alicia Borinsky

Visitas médicas 

es un absurdo querido doctor
 déjeme explicarle: 
                     si cuando desesperada corre de
un lado de la pieza al otro y tomando una aspirina 
trata de metérsela en el ombligo porque eso cura
esa enfermedad masiva que para ella trabaja de adentro 
para adentro no es porque usted le guste ni quiera 
llamar la atención metérselo en el bolsillo
entrar en la cosa de doctorcito doctorcito quién
es la paciente más hermosa 
            y si bien es cierto que
su locura es sobre todo seducir mantener la 
situación fuera de los calendarios inventar bebés 
apacentar enormes terrenos solitarios jardines
donde su hechizo es único desierto de olores
(así es mejor mucho mejor abrirse estilo flor y
eso que insiste se insinúa es más homenaje que 
fracaso más deseo que guante) Carnavales sin 
disfrazados andar por la calle enamorar a un niño 
que aún no dice mamá Saber que durante años lo 
perseguirá su imagen anónima la horma de su placer 
Atardeceres en un bar causas inexplicables de 
pelea entre novios de la infancia Hombres y mujeres alucinados 
por la posibilidad de su contacto se dan cita siglos
después de entreverla no sea absurdo doctor 

          ella conoce la modestia de estos tiempos
          el refresco en mesa de plástico
           las transgresiones de jóvenes viejos abogados 

           quiero fruncirlo todo hasta convertirlo en pollera 
           la lucirá en carnaval con lentejuelas 
           bailará en este mundo y usted 
           seguirá diciendo que está en otro. 



Inmortalidades de marioneta

los médicos le habían indicado que se muriera de a poco 
un día por semana 
                                ensaye el paro de corazón 
los ojos revueltos
la mano que no sabe hacia dónde
ensaye por ejemplo la expresión de su vecina 
la nueva situación en el archivo policial
el terremoto que se anuncia en Chile
ensaye nuestros gestos y nuestra tribal armonía 
a unísono conmemoremos la intención de caer
el juego de haber caído ya
la noticia de cuántos faltan
el apocalipsis 



Te cuido como si fueras mía 

tus cuentos me sirvieron para asustarme del día 
por eso uso este antifaz 
                                  recibo a mis amigos por la noche 
con un té dulzón
y les digo: juguemos a las cartas 
dispongamos de los minutos que nos quedan
no velemos el sueño de esta mujer 
                        es una impostora 
una brujita de carnaval 
un chiste pringoso
un caramelo clavado en el medio del alma 



Filomena dale que dale con la poesía 

siempre se baña por la tarde
para que la espíen los vecinos de enfrente
tiene un lunar que le pica en el brazo
a los cinco años pensó por primera vez en suicidarse 
a los siete en un hombre que encontró veinte años 
                                                            después en una plaza 
y ahora a los cuarenta 
                te escribe 
                                 carta tras carta 
¿cómo no le da vergüenza? 
que se calle la boca basta ya
(a mí personalmente me gustaba más de chica 
tan romántica con su aire de muerta joven
tan trágica tan amante de la poesía)



Carreras

para no ser menos todas estas emociones para no ser menos 
en realidad importa otra cosa que
fluir entre cuchilleos de amantes celosos
oír hablar de sí misma en rincones propicios a la alabanza
para no ser menos 
          pavo real exhibiendo una pluma podrida 
          oveja con pelo lacio
daba vueltas en la cama estilo trompo de señor mayor encauzado en la locura



Enfermedades de la Venus de China

Cuando era chica y tenía fiebre 
la tendíamos a la intemperie
le quitábamos la matraca 

lloraba a gritos vos sabés lloraba a los gritos 
porque no había recreo posible
los relojes parados a la hora exacta
Qué loca que era desde chica 

no quería al médico no quería a la tía
no quería al señor a la salida del parque
no quería a nadie esa chica asquerosa
ese mosquito joven interfiriendo en nuestros coitos
decía: “la feria me cansa la televisión me irrita
no me besen ni me toquen ni me enseñen métrica 
me joden los diarios los entierros el jabón tocador” 
mosquito en el ojo entre ceja y ceja
nunca encuadernó un libro ni se interesó por la salud 
de sus maestros ni veneró a sus amantes por ternura
le habían indicado que se muriera de a poco
imposible con tanta documentación fotografías 

una arqueología de voces y puñales 
ordena el amor de sus guerras
Hay prólogos divisiones estratos
en su interminable longevidad. 



Mesa familiar 

mi suegra tiene una cartera negra de la cual saca fotos de su hijo predilecto vestido de monaguillo de soldado de mozo y me las muestra con lágrimas en los ojos ella luce imponente mientras yo le leo la crónica de nuestros triunfos le muestro las fotos de mi hijo le doy una estocada cuando le digo es pequeño es nuestro come lo que le doy todos los días y dejo que se vaya vencida sin regalarme la torta en el fondo de la cartera seguro que se deshacerá en miguitas y ella las ofrecerá una por una a las palomas de la plaza hasta que anochezca y pueda maldecirme exuberante
pelo suelto tacones colorados 



No saltes

Le habían dicho que eso era el jardín 
Ahora espera a los asesinos
Con piruetas sin adorno 
se precipita hacia la acción 
Su arma es el desapego
Una intensa curiosidad 
le hace saltear estos abismos. 



El teatro de marionetas queda a unos pasos 

al desconocido del puente, en Praga
 

demasiado pálido para sonreír 
este muchacho en mayo sweater verde oscuro y anuncios de conciertos 
en iglesias        nos hemos cruzado en el puente más de una vez y nos 
reconocemos viciosos de las estatuas la niebla el río marrón la 
anticipación de que acaso el aleteo de una paloma o la manera en que 
cae la lluvia nos revele algo un dato una clave viviremos menos que 
las piedras menos que los putti que insolentes bailan y se abrazan en 
arreglos histéricos viviremos menos por eso nos apuramos nos 
saludamos casi alegres antes de desaparecer en aquella calle este teatro 



A este baile venimos de lejos 

para Cola Franzen
 

Todas mueren al dar a luz 
lo sabíamos pero nadie se ha enterado
Juntas cocinamos una torta espléndida
Enviamos invitaciones a gente con ocupaciones dudosas 
El chiste es para la punta de una flecha 
queremos rogamos y tratamos de que te llegue 
antes de que tengas las maletas cerradas a doble llave 



No le creas 

si mis consejos te aturden basta con que digas: 
por favor la silla de ruedas 
odalisca paralítica
hojita en la tormenta 
aquí estaré para protegerte
darte un seguro de salud gratuito 
cerrar la puerta a doble llave 



Vive apurada 

su desenfreno le provoca olvidos 
tiene un aliento a chocolate blanco 
un vago tufo a cigarrillos sin filtro 
      se viste de ocre
            en el verano parece desnuda 

fue una distracción amigos
no supo que se estaba muriendo 
no atinó a despedirse 
      decirnos:
            este se lleva el guante 
aquel otro las pinzas de cobre 



Quieren fijar fecha y lo lograrán como todos 

Rataplín rataplán 
es un cojo 
    reventado
         matraca alharaca gotea caca 
es un tarado
        pata de palo 
es un idiota
    cabezota embarrada 
            jeta de rana 

es un jodido que te canta una serenata 
y vos melena desatada
boca entreabierta
     esperas 
        sonríes haces planes limpias ventanas
fijas ya la fecha encargas el vestido tienes tu tercer hijo 



Una más una es una 

la mujer de mi marido es perfecta
él la adora cada minuto del día y la noche
es infatigable      buena cocinera        madre ejemplar 
amante misteriosa y perfumada
la mujer de mi marido me da cita por la tarde
nos vemos a escondidas      nos imitamos
y con el apuro de la despedida a veces 
          una se queda
                   antes de que se vaya la otra



 ¿Y vos de dónde saliste? 

homenaje a María Félix
 

más que nada es el dibujo de tu cara 
cejas arqueadas para el asombro 
labios desdeñosos
ojos abiertos por la cirugía 
todas esas horas para nosotros 
despeinados admiradores de tus inventos 
toda esa ropa para nosotras
arrugadas oficinistas que suspiramos 
por tus encantos sirena náufraga 
estrella de un planeta equivocado
diva sin libreto en un escenario desierto 



Mi mejor amiga es antisemita

nos tiene asco pero le gustan nuestras cosas 
a solas codicia el oro la cebolla del guiso los sillones 
tapizados el acné de mi hermano el auto que cree que nos 
compraremos diplomas y falta de diplomas codicia y 
desprecia envidia y quiere recuperar todo lo que le falta 
acusa nos dice usurpadores pule su acento y las joyas de su 
abuelita ya lo sabemos pero igual decimos hola cómo le 
va qué tal la familia   no no faltaba más pase que no me 
importa esperar un poco   total en la cola uno se divierte 
habla con los amigos pase pase pase sírvase   compartamos 
el pan   el veneno   la vida      el aire de todos los días 



No hay mal que por bien no venga

entraron a la casa 
se llevaron un teléfono inalámbrico 
pantalones    camisas cuadernos llaves tenedores cuatro 
cuchillos de plata retratos de familia un reloj de contrabando 
interrogaron   escupieron les dieron una paliza a cada uno 
menos al más joven porque a él le prometieron un viaje en 
auto y seguro que todavía estarán dando vueltas después de 
tantos años después de las consignas los abogados las 
búsquedas estarán dando vueltas en ese auto negro flamante 
pensar en las malas películas que no vio cómo se salvó del 
desempleo y la estupidez de los chistes en esta ciudad 
desierta 



Si te contara lo que nos espera 

viviremos en una ciudad de niños dictatoriales con planes 
                                                     [que nos incluyen 
saben cómo usar nuestros desatinos
             ponerlos en un programa para la computadora 
volvernos útiles sin interpretarnos
acariciarnos sin siquiera advertir nuestra temperatura 
espléndidos en su juventud apenas nos hablarán 

¿qué pueden importarles las canciones pasadas de moda 
los celos con que nos disputamos medallas y sacrificios? 



Sabor local 

es una india de cara aindiada 
y si le hacen la cirugía plástica 
para que luzca
más varonil
yo me apunto
yo sería feliz 

porque siempre la quise 
bigotuda y frágil 

gorda anoréxica
hermana
desconocida en el puente 



De tanto ajustarme el cinturón 
       quedé hecha hebilla 

ya no queda cambio 

me tenés que dar la plata justa y 
ajustarte a las consecuencias 
dame todo lo que me debés 
hasta la última monedita 

aquí ya no tenemos paciencia
a la murga que nos llama
al corso que no termina
a la tristona de los pezones marrones
a mis dulces acreedores les digo 


vengan queridos juguemos al arroz con leche
al subeybaja
a la cigüeña bizca y al pan bajo el brazo 



Te queda mejor sin rouge

su mejor amiga la convence de que salga así paliducha 
pobretona vestida de marrón natural querida natural y ella
naturalmente deja que le salga la tristeza de adentro deja
que se le escape un paisaje de otoño gorriones ese alfajor
 medio reseco que le dieron distraídos para que se callara 
la boca de una vez mientras ellos hacían no sé qué cosa deja 
que se le escape el hedor y la espesura de su aliento para 
qué para que se espanten y le pidan por favor la próxima 
vez quedáte en casa si te sentís así la próxima vez no
vengas ni llames ni me digas esta canzonetta es para vos no
deberías cantar sin cepillarte los dientes no deberías pavota
 pavota le dice su mejor amiga y hay que ver cómo se ríe 
con sus mejillas coloraditas y esos labios pintados con la  
forma de tu corazoncito 



El sexo de los panaderos 

enharinados toquetean al empleado de turno 
están rendidos después de tanto ajetreo
pero qué dulces las fricciones 
           qué pringosa la alegría 
                 el suspiro 
             la leche de mi desayuno 



¿Viste que ahora hasta se parecen? 

a Tomás le dio un ataque al corazón justo cuando María 
entraba a su vida entonces el amor le vino rebajado fue una
cosa tristona y lechosa que llamaron cumbia y también día
del juicio final y nuestro aniversario y el cumpleaños del 
pelele porque ella le enseñó a caminar otra vez Atención es
su muleta y también la hermosa enfermera en vez de lo que 
te gustaría la recogida la igualada la del maquillaje demasiado
fuerte la mosquita muerta 



La música de las esferas suena también
                aquí esta vez sin monedita

el único pajarito vivo en esa ciudad entona un canto
estilo chillido 

espera a una alondra atolondrada
que nunca vendrá amigos nunca vendrá
quedó detenida por averiguación de antecedentes 
desapareció sin dejar huellas
la alondra desmemoriada
 
en otra ciudad
en un lugar que no existe aquí
abofeteamos a la alondra
y le dimos jarabe al pajarito
 
para que sepan y lo repitan 



Las cárceles de ahora no tienen rejas 

andan todos libres
con la cola entre las piernas
los bolsillos cosidos para siempre
y en la cabeza un disco rayado dale que te dale con el asunto
de los centavos y los millones y los cuerpos quemados y los que 
flotaron y los chicos robados andan por ahí dándole vueltas a la 
cosa y cuando aparece una novia una cantante de ópera en el 
escenario una maestra el cura el toqueteo ahí donde les gusta 
se le para un rulito o dos o varios depende de la cantidad de 
pelo que tengan entonces vienen y se los cortan y ya no tienen 
más consuelo 
            delincuentes amortizados calvos expiatorios 



Y vos ¿por quién te tomás? 

siento mucho cariño por tu cojera tiernamente te contemplo 
en días lluviosos y te ayudo a cruzar la calle en esta ciudad 
entramos siempre a una cueva en el medio hay una vela que 
le prendimos a san cayetano por eso tenemos tanto trabajo 
ya no importa que andes perdido porque te encontré debajo 
de mi colchón 
         es tu respiración entrecortada por las noches tus 
     amorosas pezuñas en la espalda y esa pierna que arrastras 
     sin arrastrarte aún 
         pero ya vendrá
                 te lo aseguro 
                 ya vendrá 



Títeres 

Como Alberto tiene tos le dan pastillas y el aire se 
contamina con un aliento químico vahos de jarabes y 
compresas pero el pobrecito no sabe que cuanto más tome 
más rápido se le pudrirá la madera y nos ama nos ama 
desesperadamente por las ganas con que lo cuidamos y la 
ternura que pusimos al pintarle su carita sonriente. 



El interminable strip-tease de la marioneta

El público excitado aguarda las maniobras 
Una a una mirará sus caras
guiada por el titiritero
Se quitará las ropas lentamente 
Cada prenda la promesa de intimidad 
Cada bretel esperanza de transgresión

Transpiran y se felicitan 
Aguardan un momento clave 
                              ver EL CUERPO 
                               poder justificar el precio de la entrada 
Envejecerán ante ella 
Continuará sonriendo
Sus manos agitadas en las caderas 
Piernas entreabiertas

El titiritero renueva constantemente las ropas 
Detrás del escenario se desvanecen sus ventajas 
Un tiempo incesante 
                               toma posesión de sus dedos 
                               jadea huesudo 



© Imagen de portada: Alicia Borinsky.




Sobre la autora:
Alicia Borinsky (Buenos Aires, 1946). Académica literaria, poeta y escritora de narrativa. Profesora de Literatura latinoamericana y contemporánea, y directora del Programa Interdisciplinario de Estudios Latinoamericanos en la Universidad de Boston. Ha publicado extensamente en español e inglés, tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica y Europa. Entre sus libros se cuentan las novelas Sueños del seductor abandonado (Corregidor, 1995) y Mean Woman (University of Nebraska Press, 1993); un libro de crítica literaria intitulado Theoretical Fables, The Pedagogical Dream in Contemporary Latin-American Fiction (University of Pennsylvania Press, 1993); y uno de poesía, La pareja desmontable (Corregidor, 1994).


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Magali Alabau

Magali Alabau

Magali Alabau. Poeta. Nació en Cuba y reside en Nueva York desde 1968. Estudió teatro. Ha publicado entre 1986 y 2016 nueve poemarios.