La resistencia que se les ha exigido a los cubanos hasta el día de hoy no ha sido otra cosa que una lenta, tenaz autoinmolación, ante la insaciable piedra de sacrificio de la patria.

La resistencia que se les ha exigido a los cubanos hasta el día de hoy no ha sido otra cosa que una lenta, tenaz autoinmolación, ante la insaciable piedra de sacrificio de la patria.
Hay que advertir que, tras las protestas del 11J, quedó claro muy pronto que la delincuencia, la marginalidad, la indecencia y el anexionismo, para el Estado, tenían una geografía: la de los barrios.
El aumento de la violencia sacude Cisjordania: Aumentan las redadas israelíes, los ataques de colonos y los toques de queda.
Revisé los nombres enterrados de igual modo en los agradecimientos del segundo volumen de ‘Soplavientos’. Eran los nuevos entrevistados, cuyas palabras, ligeramente editadas, llegaron a formar el ecléctico estilo narrativo del periodista.
Javier Milei gana la presidencia de Argentina, poniendo fin a la era Kirchner y prometiendo drásticas reformas económicas y una vuelta a los valores liberales. ¡Viva la libertad, carajo!
La ex primera dama Rosalynn Carter, pionera defensora de la salud mental y estrecha asesora del presidente Jimmy Carter, ha fallecido en Plains, Georgia.
El fascismo entre los cubanos no es nada particularmente malo. Por el contrario, se nos da bastante bien y lo entendemos mucho mejor que a la democracia.
El destino de Argentina pende de un hilo: La promesa de estabilidad de Massa frente a la sacudida radical de Milei en la votación decisiva de este domingo.
La gelatina de Lovecraft y el coágulo del monstruo de Giger acentúan su índole queer en un homenaje-intervención de Luca Guadagnino: Suspiria contiene una de las secuencias de brujería más impactantes del cine de hoy, lo femenino es el arma que se empuña contra los hombres y su milenaria culpabilidad.
Presentación del libro Espantado de todo me refugio en Trump, de Orlando Luis Pardo Lazo, en la librería Books & Books.
―Eso, lo que es quedarse sin amor ―me dijo. No le dije ni que sí ni que no. No tenía sentido decirle nada. Ni decirnos nada. Y los dos lo sabíamos.
¿Por qué el Ministerio del Interior cubano no diseña más ‘apps’? ¿Hay que pensar ya, por ejemplo, en una aplicación que le permita al usuario saber en cada momento dónde está Luis Manuel Otero Alcántara —en qué patrulla, en cuál estación policial—, y compartir la ubicación con sus amigos y contactos?