Una generación que ha sufrido palos. Creo que muy pocos de nosotros quedan viviendo en la Isla.

Una generación que ha sufrido palos. Creo que muy pocos de nosotros quedan viviendo en la Isla.
A mí nadie me dijo que iba a trabajar en una favela de Caracas. Porque eso que llamaban “la comunidad” era un suburbio con calles de tierra, perros sarnosos, niños descalzos y tipos con aspecto de asesinos.
“Durante mi estancia en España perdí el ‘chip’ que nos instalan a todos los cubanos desde que nacemos y, aguantar la sarta de tonterías, arbitrariedades, abusos absurdos, mezquinos y mediocres que constituyen la vida normal de cada día en Cuba, se me hizo intolerable”.
‘Siento que he cumplido conmigo mismo, que no me he quedado callado o cruzado de brazos ante las cosas que me molestan.’
Yasiel Elizagaray pertenece a la tradición del retrato sugestivo con rasgos expresionistas, que tuvo grandes exponentes en la vanguardia cubana.
Nicaragua emerge como el puente crucial en la ruta migratoria hacia EE.UU. para africanos, cubanos y haitianos. En Managua, una red de servicios y guías facilita el trayecto.
Todos se irán, como se fueron Fidel Castro y Gina Lollobrigida. Nos dejaron como un toque a punto de sepia en Technicolor, impreso en la memoria de una época espectacular.
La Organización de las Naciones Integradas había hecho declaraciones. Prácticamente autorizaba a matar a los casos más violentos de rabia.
Descubrimos en la ciudad de Holguín a la joya dormida de nuestras letras, a la ‘Dama de la poesía holguinera’, a quien mejor supo combatir, desde otro encierro voluntario, la saña del comunismo en todo el Oriente del archipiélago.
Entrevista con Marlene Azor a propósito de su libro Discursos de la resistencia. Los proyectos políticos emergentes en Cuba, (Hypermedia, 2016).
Leyendo entrelíneas Palabras a los intelectuales: «al mismo tiempo y de la misma manera que la burocracia política y la sociedad coartan y catonizan a sus miembros, les conceden dosificadamente reconocimientos, es decir mantienen lo censurado dentro del itinerario convivencial, aquilatándolo con ciertos méritos».
Del arte a las “políticas del arte” hay solo un paso. Siempre a favor de una mediación oportuna o finalidad oportunista.