Ariel Camejo es doctor en ciencias literarias por la Universidad de La Habana y con él conversamos sobre tropos, alimentación y lenguaje en Food Monitor Program.

Ariel Camejo es doctor en ciencias literarias por la Universidad de La Habana y con él conversamos sobre tropos, alimentación y lenguaje en Food Monitor Program.
Hay una violencia monstruosa y metastásica, y de momento uno quiere ser otro. Salirse. Escapar.
Conozco a una persona adicta al agua. Esa persona adicta al agua puede tomar más de siete litros al día. Esa persona adicta al agua es una persona vacía. Es una persona que no sabe a nada.
Exorcizar los demonios que atormentan a Cuba y su arte, y que no sean enterradas en una tumba coronada por un epitafio hipócrita.
Tú los duermes en público, Fidel, del malecón para afuera. Que, del malecón para adentro, yo te los meto en cintura, Fidel.
El plan de Biden de ampliar el muro fronterizo en el sur de Texas se enfrenta a una dura reacción local que reaviva debates de décadas sobre inmigración, derechos sobre la tierra y cuestiones medioambientales.
Israel retoma comunidades en torno a Gaza. Las FDI y Hamás se enfrentan en el enfrentamiento más mortífero desde 1948, con más de 1130 víctimas mortales en solo tres días.
El enfrentamiento entre Israel y Hamás, que ha causado más de 1100 muertos, hace temer una guerra prolongada que desestabilice un Oriente Próximo ya de por sí tenso.
A José Lezama Lima le quedó, de por vida, un tremendo terror a los elevadores.
No muchas veces los poetas cubanos (de cualquier época) han sabido hacer poemas tan divertidos como Oscar Cruz, poemas que mezclan a la perfección el poder y la gracia.
Dos veces conocí en persona a Gabriel García Márquez.
Él entraba y salía como “Gabo por su casa” de la Isla de la Libertad, donde año tras año a muchos nos negaban sin explicación el Permiso de Salida para viajar al exterior.
Va a ser una matanza. Empieza la carrera por el Premio Nacional de Literatura en Cuba. Comienzan las nominaciones. El conteo de esperma. La ovulación. El hurra hurra institucional. Va a haber sangre, sudor y algunas lágrimas.