La represión en Cuba mantiene a 18 artistas en prisión, muchos enfermos. Nuevas condenas evidencian la criminalización del disenso.
La represión en Cuba mantiene a 18 artistas en prisión, muchos enfermos. Nuevas condenas evidencian la criminalización del disenso.
Ahmed Gómez interroga nuestra herencia de las vanguardias artísticas y lo que podemos rescatar hoy día de sus anhelos revolucionarios.
En mis sueños, en Cuba, mi padre se me aparecía vivo. Bonachón, en su cuarto de atrás, ignorante de que acababa de venir de entre los muertos.
Suponer que la desaparición del chavismo desatará un efecto dominó, podría tratarse solo de un cálculo entusiasta.
Una vez montados en el avión, ya no podía pensar en ninguna otra desgracia. De lo contrario, no estaría aquí contando la historia.
Encuentro a una pareja. Agitan un cartel rústico donde se lee «Alligator Auschwitz». Todo está tan húmedo y seco, my President, que por primera vez creo que tienen razón.
La tala indiscriminada responde a lógicas de urgencia y crisis energética, pero remite también a estructuras de desigualdad y olvido institucional.
El 25 de mayo de 2011 yo estaba en La Habana. No solo era el cumpleaños de mi hermana, sino que estaba muriendo en México, Leonora Carrington.
El ODC alerta sobre los peligros de la “democratización controlada” que propician medios como ‘La Joven Cuba’.
Mis amores de los setenta / están cumpliendo sesenta. / Algunos apagaditos como florcitas sin agua / —la sal charchaleando en la herida— / quijotes unos buscando molinos / amargados por el exilio muchos / amañados otros con los sandinistas.
El mártir no dijo absolutamente nada cuando lo barrieron desde el cielo. Su testamento es territorio estéril.
Salir de Cuba luego del 1 de enero de 1959 se volvió, tal vez, el mayor acto de esperanza al que pueda acudir un cubano.
“Son estas organizaciones las que actúan como brigadas de choque al servicio de las políticas represivas del Gobierno cubano en el exterior”.
La fatalidad demográfica, a la vuelta de décadas y décadas de castrismo “de todo el pueblo”, demostró ser más contrarrevolucionaria que el fantasma de la democracia.
“Esas anotaciones, usurpadas por los árboles del bosque, son nada menos que su diario de campaña, de guerra”.
El Consejo de Transición de Haití pretende acabar con el dominio de las bandas y abordar las profundas desigualdades de cara “al día después”.
La expulsión del CICR de Nicaragua deja a más de 90 presos políticos en un estado de vulnerabilidad.
Con Milei, el gobierno argentino sólo mantendrá la actual representación formal en estos países, similar a su enfoque con el régimen fundamentalista de Irán.
Para los represores cubanos no es suficiente con que la gente trate al KKK y al Führer como si de brujas ninfómanas y hombres-lobos se tratara.
La posición actual de LASA respecto al gobierno cubano no puede sostenerse ni justificarse si no es como el abrazo tácito a la dictadura y a la falta de derechos. Si LASA no tiene problemas con apoyar a un Estado cuyo vocero es Humberto López, yo no puedo seguir en LASA.
Frente a Kcho, Castro fue el creador de la balsa; frente a Martiel, el inventor del negrismo. Encarado a Luisma, Castro es el administrador del destierro como arma biológica: el Calixto García es su Hialeah a menos de noventa millas, con rancho en bandeja y remedo de Medicare.
Ernesto Fernández es conocido principalmente por el reportaje gráfico de los “épicos” años 60: la fotografía de guerra, género del que es un ícono. Se conoce también su ávida retratística de los años 70. Sin embargo, queda rezagada la primera etapa de su creación: la década de 1950, la revista Carteles y la fotografía de los protagonistas de una Habana desvelada.
La curaduría como puesta en escena del pensamiento y un intento de diálogo con los públicos del arte contemporáneo desde lo sensual, lo espiritual y lo intelectual.
Coyula pudiera verse como el más reciente “testigo revolucionario”, uno cuya forma de hacer y entender el cine continúa evolucionando, reinventándose y desafiándonos. Alguien que no está aquí para acariciar o aplacar: está aquí para clavar el aguijón.
La empresa estatal Paradiso parquea sus ómnibus cargados de turistas en el ISA. Cobra un precio exorbitante por el servicio de transporte y la entrada. Aún es un misterio el destino de esos fondos.