—Ya entiendo… ¿Tiene que ver con mi negativa a participar en las Guerras Africanas? ¿Es eso?
—Eso mismo. Espero que comprenda.
—Ya entiendo… ¿Tiene que ver con mi negativa a participar en las Guerras Africanas? ¿Es eso?
—Eso mismo. Espero que comprenda.
El Estado Islámico reivindica la autoría después de que hombres armados con uniforme de combate abrieran fuego y, al parecer, detonaran explosivos en el Ayuntamiento de Crocus.
La negligencia fiscal y las erráticas políticas empresariales pueden hacer descarrilar el sueño de un Singapur en El Salvador, sostiene Bloomberg.
Alejandro Hernández ha guionizado parte de su vida y experiencias en historias universales, en una trayectoria que tuvo su génesis en Cuba.
El ODC entiende este Congreso como un evento orquestado e instrumentalizado, que pretende proyectar la mentalidad de plaza sitiada tras la que el poder político se escuda.
Mi zona cero literaria es una manera de labrar un territorio.
Esquire: “Es obvio ahora. Deberíamos haberlo sabido desde el principio”.
Hacemos responsable a la directiva del centro penitenciario Combinado del Este por cualquier acción vejatoria contra el periodista y artista Ángel Cuza.
“Sigue siendo inconfundible el timbre único de Amaury Muro, el tono de cantautor que sirve de puente entre lo tradicional y lo contemporáneo”.
¿Por qué está tan fría?, ¿dónde están sus pies? (ocultos bajo un embalaje blanco que incorporaba el ataúd), ¿ahora qué toca hacer?
Una película sin catarsis, que habla de la crisis de fe de todo un país. Una película todo el tiempo al borde de las lágrimas.
Es ahí donde confluyen curiosos, asiduos, deseosos, guapos, conocedores, inexpertos, pingueros, despechados, faltos de dinero. Todos en busca de lo mismo: sexo, contacto.
Fina García Marruz nos ha dejado un libro sobre la República, mucho más hondo, original y brillante que las memorias noveladas escritas por su esposo, Cintio Vitier.
Similar a las llamadas calientes que nos hacían en la adolescencia chicos anónimos para decirnos cochinadas. Pero no había fotos de por medio, solo la fantasía trepidante.
Parece confirmada la ratificación en la Asamblea Nacional.
Este es el texto sobre el concierto de Habana Abierta en Gibara, donde el público escuchó los temas de siempre, esos con los que el grupo plantó bandera en La Tropical, en su primera Cruzada. Y en aquella otra, que me dejó un mal sabor. Como el ron casero en los años 90, que a pesar de todo me tragaba. ¿El (mal) sabor del fin?
Un día llegaron unos jóvenes con nuevas ideas, con ganas de cambiarlo todo. No traspasaron la cerca, pero así y todo eran un peligro. Estaban en contra del maltrato animal, y rechazaban cualquier tipo de abuso de género. Representaban, en fin, todo lo contrario a lo que el jefe había establecido en su terrenito.