Through sobbing tears she said “Es que, mija, tú eres la reina.” She wiped some of the tears away and said it again: You are the queen.
Through sobbing tears she said “Es que, mija, tú eres la reina.” She wiped some of the tears away and said it again: You are the queen.
Discurso Especial de Javier Milei, presidente de Argentina, en la Reunión Anual del Foro Económico Mundial en Davos, Suiza, 17 de enero 2024.
Una parte considerable de la herencia cultural inmueble del país está a tiempo de ser rescatada, pero se trata de una realidad inmersa en el caos generalizado que es hoy Cuba.
Es la Uneac, la organización que acompaña proyectos que coartan la libertad creativa, la que atropella a mujeres intelectuales; la que ideologiza y politiza el consumo culturaly educativo de las niñas y los niños cubanos.
No hay eventos a los que acudir: ni tertulias, ni festivales, ni espacios de opinión donde se pueda debatir qué se debería hacer con las estatuas, una vez que el sistema se desplome.
La atención a la migración cubana es una deuda de solidaridad que la región aún no ha saldado.
La pérdida de otra vida en la más absurda cotidianidad de una nación sin rumbo y sin destino.
¿Quién es Leopoldo Ávila? O, más bien, ¿quién era, quién fue, Leopoldo Ávila? El principal sospechoso, Luis Pavón, murió hace algunos años; el otro, José Antonio Portuondo, lleva más de dos décadas muerto. En todo caso, la identidad del seudónimo no es tan importante como su sentido.
Esta entrevista rememora una época en la que fuimos felices dentro de una arquitectura renovadora que dio paso a un gris prefabricado cada vez más oscuro y terrible.
¿Qué sabes tú, Señora / de la Gran Llave, / apoyada en tu propia apertura / a los golfos abiertos?
No vas a entenderlo si eres prisionerx de tus limitaciones, tus esperanzas, tus ideas, tu ignorancia o tu anhelo de saber.
Yo dibujaba con café, con tierra. Hacía una pasta machacando pastillas de los medicamentos que son de colores, como el timerosal, el yodo, el alusil para la acidez.
La tormenta tropical Idalia causa estragos en Florida y Carolina del Sur, provocando grandes inundaciones y cuantiosos daños.
Una amiga me enseña unas figuras de madera que me ponen a trabajar el coco. “¿De quién son?”, le pregunto. “De Orestes Hernández, un tipo que está fuera de liga”, me dice. Yo no estoy muy al tanto del arte cubano actual, pero me pongo a buscar en Internet y veo otras esculturas, instalaciones… Y veo una foto de Orestes Hernández. Me parece conocido.