Minima Geste, de 33 años, se ha convertido en el último punto álgido de la guerra cultural en torno a los Juegos, tras las disputas sobre la música de la ceremonia de apertura y el póster oficial de las Olimpiadas.

Minima Geste, de 33 años, se ha convertido en el último punto álgido de la guerra cultural en torno a los Juegos, tras las disputas sobre la música de la ceremonia de apertura y el póster oficial de las Olimpiadas.
Un ataque con drones sacude el centro de Moscú y los escombros caen sobre el Centro de Exposiciones de la ciudad. Rusia culpa a Ucrania. No hay víctimas.
El mar, los objetos y nosotros, flotando. No me quiero ir. Es aquí donde puedo abrir los brazos sin tropezar.
‘Yusimí, la película’, filme cubano producido completamente independiente, ya se encuentra camino de su estreno, luego de cinco años de producción.
La trayectoria activista de De Los Santos cobró impulso tras su primera visita a Cuba en 2006, un viaje que marcó el inicio de su alineación con las ideas socialistas.
Una ciudad donde sus habitantes se dan el lujo de soñar, porque no cuesta nada, y los más soñadores ya tienen la huida programada.
Ernesto Fundora (La Habana, Cuba, 1967) es director, guionista, realizador de video clips y escritor. Su obra cuenta con cortometrajes, documentales y más de noventa videos musicales. Ha recibido numerosos premios y una nominación al Grammy Latino por “La negra tiene tumbao”, de Celia Cruz. Vive exiliado en México.
Los asesinatos en México, las detenciones en Cuba y la supresión de medios de comunicación en toda la región ponen de manifiesto la crisis de la libertad de prensa.
La libertad de prensa en el mundo está gravemente amenazada, y los periodistas se enfrentan a un aumento de la violencia y las detenciones.
También en Cuba llueve una lluvia ácida esperanzadora, un tiempo tormentoso que se recrudece, una lluvia constante que no se acaba de llevar lo malo, ni la mala.
El pueblo es un sustantivo mayúsculo al que se le agregan adjetivos altamente politizados como “antimperialista”, “revolucionario”, así como “trabajador”, “enérgico y viril”, y más tarde “fidelista y martiano”.
En la siguiente lista se agrupan diez abordajes fílmicos no pornográficos —algunos extremos y “escandalosos”— a este dominio de los sentidos y las sensaciones, de lo cerebral sin restricciones, de la libertad abrumadora y complicada, de la amoralidad.
“No me gustan las etiquetas porque, más que acercarse al entendimiento, ponen el arte en un lugar remoto para los espectadores”.
Esa es otra “gratuidad” de una política cultural férrea, maleable y corrupta, pues mediante contactos personales y amorosos, y también a través de sobornos, metecabezas penetran los medios de difusión masiva, virtualmente convencidos de que el consenso popular logrará redimirlos ante una fantasiosa posteridad.