En Estambul, cuerpos de especialistas dilucidan si es viral o bacteriano el arte cubano.
Marlene Azor
Marlene Azor es doctora en Ciencias Sociales y Humanidades. Entre otros libros, ha publicado ‘Discursos de la resistencia: Los proyectos políticos emergentes en Cuba‘, por la editorial Hypermedia, en 2016.
La maldad y los poetas nacionales
Agustín Acosta y Nicolás Guillén: ambos eran “de provincia”, estudiaron Derecho, presumieron de antiyanquis, cultivaron eso que se llamó “poesía social” y vertieron bilis sobre Lezama y Orígenes.
Magdiel Jorge Castro
Magdiel Jorge Castro (Holguín, Cuba, 1994) es un activista cubano, doblemente exiliado y solicitante de refugio político en Uruguay.
Rosie Inguanzo
Rosie Inguanzo (La Habana, 1966). Narradora, poeta, actriz y performer. Profesora. Tiene un doctorado en Español y Literatura Iberoamericana por la Florida International University. Ha publicado la novela ‘La Habana sentimental‘ (2018) y los poemarios ‘Deseo de donde se era’ (2001) y ‘La vida de la vida’ (2018).
Cura de caballo
Estar consciente, ‘woke’, es echar limón sobre esa heridita en el dedo que no sabías que tenías. El precio a pagar por esta híper consciencia es el agotamiento.
La voz y el bozal: Plácido y Francisco Orgaz
Los mártires mueren sin renunciar a su causa o sus ideas, y Plácido siempre dijo que era inocente.
Del Estado demiurgo al Estado de las tinieblas
La Revolución Cubana, eso que se entiende desde la alquimia historiográfica oficialista como un tiempo capsular de consumación teleológica, trajo consigo al Estado de las tinieblas.
Lo más reciente
Tres óperas primas cubanas
A propósito de El regreso (Blanca Rosa Blanco), El viaje extraordinario de Celeste García (Arturo Infante), y Un traductor (Rodrigo & Sebastián Barriuso).
Uber Cuba 0069
Cuando llegamos a nuestro edificio, por fin me miró. Tenía los ojos de mi madre y sus facciones aguajiradas de cuando jovencita, más o menos en los años del triunfo de la Revolución. No tuvo que decirme más nada. Los dos entendimos que los dos lo habíamos entendido.
Bienal fatalité
Tengo un amigo que cuando habla de una mala obra de teatro se lleva la mano a la frente y sentencia: fatalité.
Esta es la única expresión que me viene a la mente cuando camino por las exposiciones, oficiales o no, de la XIII Bienal de La Habana.